Berlín acogerá la polémica colección Flick de arte contemporáneo

Berlín se ha hecho con la rica colección privada de arte contemporáneo de Friedrich-Christian Flick, que se disputaban también Nueva York y Zúrich. Una colección que arrastra la polémica suscitada por la negativa del magnate a contribuir a un fondo de indemnización de esclavos del nazismo que "limpiara" su apellido. Su abuelo, Friedrich Flick, tuvo excelentes contactos con algunos de los principales líderes nazis y durante esos años negros de la historia alemana empleó en su gran industria de armamento mano de obra esclava. Fue condenado a siete años de cárcel por el Tribunal de Núremberg en 1945.

Las protestas de intelectuales alemanes y suizos por la negativa del magnate a contribuir al citado fondo impidió que la colección se exhibiera en Zúrich, donde se había proyectado incluso un museo diseñado por el arquitecto holandés Rem Koolhaas a partir de la rehabilitación de un viejo edificio industrial. El Hamburger Bahnhof, uno de los tres museos que componen la Galería Nacional de los Museos Estatales de Berlín, prevé exhibir a partir de la primavera de 2004, y por un periodo inicial de siete años, la polémica colección, que consta de unas 2.500 piezas. Hasta entonces, el propio Flick financiará la rehabilitación de una de las alas del Hamburger Bahnhof, el llamado pabellón Rieck, un espacio de 300 metros de largo y unos 12.000 metros cuadrados de superficie de exposición. "Entiendo que el señor Flick acepte y se haga preguntas sobre el pasado de su familia, pero no que entre ello y la colección se establezca un vínculo que impida el acceso del público a la misma", señaló la secretaria de Estado de Cultura, Christina Weiss.

150 artistas

"No hay motivo alguno para no presentar la colección aquí", apostilló el alcalde-gobernador de Berlín, Klaus Wowereit, quien completaba la representación política en la rueda de prensa en la que Flick dio a conocer la firma del contrato con Berlín. "Mi colección es un ejemplo de buena colaboración entre las autoridades y las iniciativas privadas con el objetivo de facilitar el acceso del público al arte", añadió Flick. El magnate declaró en su día que él no es responsable de lo que hizo su abuelo.

La colección es una muestra de obras de 150 artistas de la segunda mitad del siglo XX -sobre todo del arte conceptual-, pero también de la primera mitad, con obras de Francis Picabia, Marcel Duchamp y Alberto Giacometti, entre otros. Flick, de 57 años, empezó a adquirir obras de autores como Duchamp en los años setenta, cuando vendió su participación en la empresa con la que su familia amasó una inmensa fortuna durante el nazismo, y estableció su residencia en Suiza. Artistas conceptuales norteamericanos como Joseph Kosuth, Sol Lewitt, Lawrence Weiner y Robert Ryman, pero sobre todo Dan Graham y On Kawara, ocupan un espacio significativo entre las piezas de Flick.