Gas Natural vuelve a la Barceloneta, a una torre de cristal de 80 metros
La compañía e Inmobiliaria Colonial invierten 60 millones de euros
Gas Natural volverá a la Barceloneta en 2005, justo al lugar donde se alzaron las primeras instalaciones de gas hace más de un siglo. Su sede será una compleja construcción en la que destacará una torre acristalada de 80 metros de altura y otro edificio en perpendicular, en forma de portaaviones. Inmobiliaria Colonial y Gas Natural han formado la sociedad Torremarenostrum, que aportará los 60 millones de euros de inversión.
La nueva sede del Grupo Gas Natural ha sido diseñada por el equipo de arquitectos de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue. Se levantará junto a la antigua torre de aguas de las primeras instalaciones que ocupó la compañía y a la estructura del gasómetro -un círculo metálico- que se ha conservado. La Sociedad Catalana para el Alumbrado de Gas se instaló en 1845 en la Barceloneta y ésa fue su sede social principal hasta el traslado al Portal de l'Àngel.
El edificio está formado por una serie de estructuras distintas y superpuestas con tres frentes, uno de los cuales estará orientado al barrio de la Barceloneta, otro a Sant Martí y otro al mar. Entre ellos dibujarán una plaza y también crearán un nuevo paso o calle que atravesará el conjunto. La parte más alta del edificio, de 20 pisos -algo más de 80 metros de altura-, tendrá forma angular y dos frentes, hacia la Ronda Litoral y hacia el mar.
A la altura del décimo piso, saldrá de la torre otra estructura perpendicularmente -que la propia arquitecta Tagliabue denominó "edificio portaaviones"- que prácticamente atravesará la manzana hasta la calle de Pinzón. Además, el proyecto supone la rehabilitación de un antiguo edificio de servicios técnicos de la compañía de gas. "Toda la fachada del conjunto de edificios será acristalada", precisó ayer la arquitecta, que puntualizó que el singular diseño del complejo tenía historia: "Un día paseábamos por la playa Enric -en referencia a su marido, ya fallecido- y yo y él cogió una piedra con una peculiar forma. Ésa fue la primera idea de salida para el proyecto". Miralles ganó el concurso convocado por la propia compañía de gas entre un selecto grupo de arquitectos.
Junto al conjunto de Gas Natural, que tendrá al otro lado de la ronda el edificio de la biblioteca provincial, arrancará una pasarela que conectará el parque de la Barceloneta con el de la Ciutadella en un futuro. De hecho, el plan especial de Cercanías ya sufraga parte del coste de la construcción de la pasarela que sobrevolará la Ronda Litoral y las vías. En realidad, más que pasarela será casi un puente, puesto que uno de sus lados medirá 200 metros.
Serán un total de 30.000 metros cuadrados más tres plantas de aparcamiento con 553 plazas, de las que 150 serán de uso público. Gas Natural reagrupará a todos los trabajadores del grupo, aproximadamente un millar, en el nuevo edificio. Según explicó ayer el presidente de la compañía, Antoni Brufau, Gas Natural ocupará 10 plantas de la torre y el edificio que será rehabilitado y dedicado a servicios técnicos. Las otras 10 plantas de la torre saldrán al mercado de oficinas que comercializará Inmobiliaria Colonial.
Para construirlo, Gas Natural e Inmobiliaria Colonial -del grupo de La Caixa- finalmente constituyeron una sociedad, Torremaresnostrum, participada en un 55% por Colonial y en un 45% por Gas Natural. Para afrontar esa inversión, Gas Natural ya ha vendido su actual sede en el Portal de l'Àngel al grupo United Colors of Benetton por 28 millones de euros y ha enajenado además su sede en la calle de Arcs de Barcelona al grupo inversor Mediterránea de Gestión del Suelo SA por otros 15 millones.
Apuesta por Barcelona
El proyecto del edificio central del Grupo Gas Natural fue presentado en febrero de 2000 con la previsión de que se hiciera realidad tres años más tarde. Las obras, sin embargo, no han podido empezar hasta ahora porque, entre otros motivos, el proyecto llegó a peligrar por la preferencia de uno de los accionistas mayoritarios, Repsol, de que el buque insignia de Gas Natural estuviera en Madrid. A esas dificultades se refirió ayer el alcalde, Joan Clos, que celebró finalmente el inicio de "un proyecto que supone una apuesta por Barcelona". En el acto simbólico de la colocación de la primera piedra -puesto que las obras ya han empezado- estuvo presente Juan Antonio Samaranch, presidente de Inmobiliaria Colonial.
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