Visto para sentencia el pleito sobre la gestión del legado artístico de Oteiza
La disputa judicial que divide desde hace un año al patronato de la Fundación Oteiza ha quedado vista para sentencia. El juicio se celebró el 2 de diciembre en el Juzgado de Aoiz, cuyo titular dictará sentencia a finales de mes. El proceso se inició a raíz de la demanda presentada por cuatro de los ocho vocales del patronato, que respaldaban el deseo del propio Jorge Oteiza de integrar a su representante artístico, Carlos Catalán, en el seno del órgano gestor de su legado.
Los dos representantes del Gobierno de Navarra en dicho órgano de gobierno -el consejero de cultura Jesús Laguna, y el director de Príncipe de Viana, Juan Ramón Corpas-, rechazaron tal pretensión, igual que el presidente del patronato, Juan Huarte, y Marisa Sáenz, hija del arquitecto Francisco Javier Sáenz de Oiza. Fue entonces cuando los patronos críticos, Jaione Apalategi, Xabier Morrás, Juan Antonio Urbeltz y José Ángel Irigaray, iniciaron acciones legales pidiendo la nulidad de todos los acuerdos adoptados con posterioridad al deseo manuscrito de Oteiza de incorporar a Catalán al patronato. Entre ellos, la designación de Alberto Rosales como director del Museo Oteiza en Alzuza, que se inaugurará en primavera.
La juez de Aoiz rechazó la pretensión de los recurrentes de suspender cautelarmente los acuerdos. El abogado del sector crítico ofreció al representante legal del Gobierno de Navarra un acuerdo previo que éste rechazó. Se trataba de aceptar la incorporación de Catalán al patronato y acordar, a cambio, que cualquier decisión del órgano debería adoptarse con al menos seis votos a favor de sus miembros, en vez de la mayoría simple. El objetivo era facilitar el entendimiento entre ambos sectores, visceralmente enfrentados respecto al desarrollo artístico, cultural y educativo del legado de Oteiza.
Alegaciones
En la vista oral, el abogado del Ejecutivo de UPN volvió a referirse a los antecedentes penales de Catalán por vinculación a grupos armados como motivo de inhabilitación del albacea de Oteiza, según lo establecido en los estatutos. Pero la defensa reiteró que tales antecedentes están cancelados -por la amnistía de 1976 y la reinserción basada en los acuerdos entre Gobierno Vasco y Defensor del Pueblo- y que Catalán goza de todos sus derechos cívicos.
Los críticos reiteran que UPN está "traicionando" el espíritu de Oteiza, denuncia que comparte el PSN, que ha pedido la dimisión del consejero de Cultura y del director de Príncipe de Viana, tras el despido de la conservadora del museo de Alzuza. Pilar del Valle fue cesada después de que una comisión parlamentaria requiriera su presencia durante una visita al museo, que puso de manifiesto las graves deficiencias constatadas en la custodia del legado artístico de Oteiza, 27 de cuyas tizas (pequeñas piezas experimentales) sufrieron daños a raíz de una filtración de agua.
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