Castellano promete severidad pero no resuelve las sanciones por la legionela

El consejero de Sanidad, Serafín Catellano, volvió a prometer ayer "severidad" contra aquellas empresas que no apliquen y cumplan con el decreto para la prevención de la legionela como medida para atajar el avance de la enfermedad en Alcoi. Los brotes de legionela del Área de Salud de Alcoi no son un fenómeno nuevo ni imprevisto, sino que comenzaron a ser evidentes en 1999. Desde esa fecha la bacteria ha afectado ya a 190 personas, nueve de las cuales han fallecido. Los últimos casos se conocieron ayer mismo y afectan a dos vecinos de Cocentaina, lo que eleva a nueve los contagios en las últimas semanas en esa población. Además, un hombre falleció el fin de semana pasado en Castellón y en Alcoi se han registrado tres casos reconocidos por Sanidad el viernes.

Sin embargo, en el largo periodo de brotes, la Administración sólo ha tramitado tres expedientes sancionadores a empresas que incumplían el decreto para la prevención. Pero estos expedientes abiertos en agosto pasado siguen sin resolverse, según confirmaron ayer fuentes municipales.

El avance de la enfermedad contrasta con la lentitud manifiesta de las autoridades para aplicar las sanciones vigentes desde la aprobación del decreto de prevención de diciembre de 2000. Desde entonces no se ha aplicado sanción alguna a pesar de que Sanidad ha detectado incumplimientos de la norma. Castellano se comprometió ayer a ser "inflexible" con estas empresas. El concejal de Sanidad en Alcoi, Julio Fontoba, reconoció que los tres únicos expedientes sancionadores que comenzaron a tramitarse por parte del Ayuntamiento siguen sin resolverse. Dos de ellos pertenecen a sendas empresas que levantaron el precinto de sus instalaciones sin previo aviso, y el tercero fue incoado a una empresa que no dio de alta sus instalaciones.

Castellano solicitó la colaboración y participación de los empresarios para cumplir la normativa y anunció cambios en el control de la bacteria. El martes próximo empezará la auditoría de las instalaciones de riesgo de Alcoi y Cocentaina. Se van a invertir 210.000 euros que serán sufragadas por Sanidad para revisar todas las instalaciones.

El martes 3 de diciembre se reunirá el Consejo de Salud del Área de Alcoi para coordinar los trabajos. El miércoles la reunión será con los empresarios con el objetivo de explicarles las propuestas que realizó la Consejería de Sanidad en la última reunión de la comisión de Salud Pública del consejo interritorial respecto al cambio de las instalaciones de riesgo, y de presentar las nuevas líneas de colaboración que incentivan el cambio y modernización de los aparatos de refrigeración.

Mientras en la comarca de L'Alcoià-Comtat aumenta la preocupación por estos nuevos brotes, los partidos en la oposición exigen responsabilidades políticas. Joan Ignasi Pla, candidato socialista a la Generalitat, lamentó la "autocomplacencia del PP" ante una enfermedad que se ha convertido "en una constante en esta comarca", y pidió mayor esfuerzo presupuestario para controlar la bactería. Por su lado, la diputada de Esquerra Unida Àngela Llinares aseguró ayer que el Gonsell no se ha tomado en serio los brotes de legionela. "No han descubierto en ningún momento el foco", denunció la diputada, quien aseguró que el retraso, a veces de 15 días, en reaccionar ha impedido detectar el origen concreto de los brotes. La diputada de EU lamentó que la Consejería de Sanidad sea tan superficial y dedique a personal becario a la investigación de un problema tan grave como éste. En Elda, la Confederación de Asociaciones de Vecinos de la Comunidad Valenciana aprobó, en una jornada de debate sobre la sanidad pública valenciana, una resolución de apoyo a los vecinos de Alcoi y Cocentaina "porque tres años después no se ha resuelto el problema".