Microsoft ficha a un funcionario europeo implicado en su caso antimonopolio
La contratación de Deflet Eckert coincide con la recta final de la investigación
Microsoft acaba de contratar a una de las piezas clave en la política europea de sociedad de la información. La multinacional ha fichado a Deflet Eckert, uno de los funcionarios europeos más veteranos e influyentes en la tecnología, y que, como tal, iba a desempeñar un importante papel en la próxima decisión de la Comisión Europea sobre el caso antimonopolio que se sigue contra Microsoft. La compañía alega que Eckert no trabajará en su departamento legal.
Funcionario desde 1988, Eckert era, hasta ahora, el director del área de análisis y planificación en la dirección general de la Sociedad de la Información, que dirige el comisario Erkki Liikanen. El trabajo de Eckert giraba alrededor de la promoción y el desarrollo de la tecnología en Europa. Su área no era la política de la competencia, pero sí supervisó informes en los que se hacía mención expresa de los casos anticompetencia que revisaba la Comisión Europea (CE). Además, competidores de Microsoft aseguran que se reunieron con él para exponerle su visión sobre las prácticas empresariales de la compañía de Bill Gates.
El caso Microsoft está en manos de otra dirección general, la de Competencia. El departamento de Mario Monti estudia si Microsoft está utilizando su poder en Windows, que hace funcionar a nueve de cada diez ordenadores, para extender ese dominio a los reproductores digitales de música y a los servidores. El hecho de que Eckert trabajara en otra dirección general ha llevado a Microsoft y a la propia Comisión a declarar que no hay conflicto de intereses. Además, el funcionario, explican, trabajará en el área de seguridad informática. La compañía ha declarado que no tendrá "ningún contacto" con el departamento legal.
Los competidores de Microsoft no quieren criticar públicamente a la Comisión, que debe decidir en cualquier momento sobre este caso. Pero sí explican que no les preocupa demasiado lo que Eckert pueda hacer con la información que ha manejado sobre las prácticas de Microsoft; es un funcionario, dicen, de probada integridad. Lo que les preocupa es lo que podría haber hecho de haber seguido en la Comisión. La dirección general de Competencia decidirá sobre este caso, con toda probabilidad, durante el invierno. Y, según explican distintas fuentes del sector en Bruselas, antes de tomar una decisión, el departamento de Monti suele consultar con la dirección general sobre la que tendrá impacto la resolución. Y ésa es la Sociedad de la Información, donde Eckert era una de las piezas clave. "Es un funcionario muy poderoso y que tenía línea directa con el [comisario] Liikanen", explica una fuente en Bruselas, vinculada a un competidor de Microsoft. "Solía ser muy crítico con la compañía, así que Microsoft ha fichado a un funcionario, pero, sobre todo, ha conseguido quitarse de en medio a un potencial enemigo", continúa.
Ésta no es la primera vez que la marcha de un funcionario al sector privado provoca polémica. Telefónica también fichó en 1999 al comisario europeo de Comunicaciones, Martin Bangemann.
Por otra parte, el Estado de Massachuseetts anunció ayer que seguirá en el caso antimonopolio contra Microsoft, aunque los otros siete Estados que quedan en la demanda no lo harán.
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