De vinotecas por Bilbao

Comienzan a florecer vinotecas y tiendas especializadas en Bilbao. La cultura del vino engancha a todos los públicos, sobre todo a los más jóvenes, que ya no se conforman con beber un vino sin saber de dónde proviene, cómo se elabora y cuáles son sus cualidades organolácticas. El público adicto quiere saber más: los cursos de cata son muy demandados y los alumnos llenan las aulas.

Esta fiebre por el vino tiene su reflejo en la transformación que ha experimentado el comercio minorista. De las antiguas bodeguillas a las que iban nuestras madres a comprar vinos a granel se pasó a las tiendas especializadas, que repartían sus estanterías entre vinos embotellados y productos de primera necesidad.

El siguiente escalón son las vinotecas que en este momento está viendo nacer Bilbao, donde el vino y sus complementos (copas especiales, fundas antigoteo, sacacorchos, decantadores y aireadores, etcétera) tienen cada vez más importancia. Son comercios regentados por profesionales muy preparados y verdaderos consejeros en la materia que satisfacen las inquietudes y demandas de ese consumidor ansioso por conocer más del mundo del vino.

En Bilbao, se pueden citar establecimientos como la Cofradía Europea del Vino (Licenciado Poza, 71), que dispone de un club de vinos propios. Sus socios y clientes pueden seguir cursos de cata y comprar caldos nacionales y de importación.

D'Vinno (Ibáñez de Bilbao, 6) se especializa en vinos selectos. Su dueña a buen seguro conseguirá cualquier caldo que se le demande.

El Mundo del Vino (Alameda de Recalde, 17) es de los últimos que han visto la luz. Allí, Rosa y Oscar sorprenden con todos los vinos clásicos y modernos, con un servicio a domicilio.

Vinos Mundi (María Díaz de Haro, 41) es una pequeña vinoteca regentada por el gran profesor Tomás, que soluciona cualquier duda del vino con su verbo fácil y didáctico. El Rincón del Vino (Euskalduna, 5) destaca por su amplia y variada selección.

A todas estas nuevas tiendas se suman los clásicos de la ciudad, como Alimentación Ibeas (Licenciado Poza, 23), López Oleaga (Astarloa, 3), Hilario Vicente (Avenida de Madariaga).

Y en el nuevo concepto de vinoteca-restaurante no hay que olvidar el Colmado Ibérico (Alameda de Urquijo, 20), donde vino y jamón encuentran un maridaje excepcional. El último local en sumarse a este concepto de vino-comida es el Halagos, de reciente apertura en la calle Maestro García Rivero.