'Las privatizaciones de empresas públicas podrían esconder financiación del PP'
Diseñó el multitudinario acto del pasado domingo en Madrid donde José Luis Rodríguez Zapatero fue proclamado candidato a presidente del Gobierno y donde se gestó lo que los socialistas denominan 'el espíritu de Vista Alegre', que les permite soñar con una inminente victoria electoral para recuperar el Gobierno de la nación.
Pregunta. ¿A qué atribuye el ascenso del PSOE en las encuestas? ¿A los aciertos de su partido o a los errores del Gobierno?
Respuesta. Hay un cambio de tendencia en la sociedad que tiene que ver con el final de un ciclo político. Responde al incumplimiento de muchas promesas que hizo el PP, por ejemplo, la regeneración democrática, la falta de respuesta a problemas que afectan a la gente, y que tiene también que ver con la política autoritaria del señor Aznar. Eso lleva al deterioro evidente del PP, además del barullo interno del Gobierno por la sucesión. No hay cosa que me haga más feliz que ver cómo el PSOE ya no habla de sí mismo, sino de los problemas de la gente. Y al PP le sucede lo contrario. Habla permanentemente de sus problemas.
'Ganaremos las elecciones sin sembrar España de crispación y odio, como hizo el PP'
Sobre los sucesores de Aznar: 'Rato es antisocial, sólo ha logrado la pérdida del poder adquisitivo de la gente; Rajoy es un antiguo que nunca se sabe lo que piensa; Mayor Oreja, un autoritario que sólo sabe hablar del País Vasco; Ruiz-Gallardón es un falso progresista que no llegará, y Acebes, más que un sucesor, es un sucedáneo'
P. ¿Tiene algún pronóstico sobre la sucesión de Aznar?
R. A nosotros nos da igual quien sea el sucesor de Aznar, e incluso, si no tienen otro mejor, que vuelva a presentarse él. Creemos que la fórmula de que uno elige a todos no es el mejor ejemplo para una sociedad que demanda de los partidos más transparencia y perfeccionar los procesos democráticos. Aznar tiene un Consejo de Ministros en el que todos se están mirando de reojo y eso va en detrimento de la eficacia en la acción de Gobierno.
P. Califique a los sucesores de Aznar. ¿Rodrigo Rato?
R. Un antisocial que sólo ha logrado la subida de precios y la pérdida de poder adquisitivo de la gente.
P. ¿Mariano Rajoy?
R.Un antiguo que nunca se sabe lo que piensa.
P. ¿Jaime Mayor Oreja?
R. Un autoritario que sólo sabe hablar del País Vasco.
P. ¿Alberto Ruiz-Gallardón?
R. Un falso progresista. No llegará.
P. ¿Ángel Acebes?
R. Más que un sucesor es un sucedáneo.
P. Defíname el modelo territorial del PSOE.
R. El Gobierno popular no ha buscado estos años el encuentro para conjugar de forma armónica el desarrollo autonómico. Los socialistas defendemos reformar el Senado para que cumpla con ese papel de armonizar posiciones para la cohesión territorial de España. El Gobierno aprovecha cualquier oportunidad para confrontar.Lo vemos estos días cuando no asume su responsabilidad en el fraude del lino y quiere repercutir su ineficaz gestión en las comunidades. O con la inseguridad ciudadana, al no dar respuesta a las demandas de que haya más policías que garanticen más seguridad. Todo eso da lugar a que parlamentos autonómos propongan tener una policía propia para responder a esa falta de seguridad. Por ejemplo, Baleares, como lo ha reclamado estos días el presidente Francesc Antich.
P. En Baleares los socialistas quieren policía propia y en Madrid los socialistas la rechazan...
R. Lo que ha hecho Antich es llamar la atención al Gobierno de España sobre un problema que tiene Baleares, donde la seguridad ciudadana ha aumentado más de un 20%. Ha dicho que se podía reformar el Estatuto si no se dan respuestas a los problemas de Baleares. Lo que hay que hacer es reformar de una vez el Senado y buscar puntos concretos de cooperación.
P. ¿Hay diferencias en las estrategias del PP y el PSOE para pacificar el País Vasco?
R. Nosotros estamos conjugando firmeza con serenidad, defensa a ultranza del Estatuto de Autonomía, de la Constitución, del Estado de Derecho, con el diálogo democrático. Y el PP debería hacer mayor esfuerzo por el diálogo democrático. No hace todo lo que debería hacer, lo que le es exigible de entendimiento y de diálogo con el Gobierno vasco y todas las fuerzas democráticas.
P. ¿Culpa a Aznar de lo que pasa en el País Vasco?
R. No. Los culpables tienen nombre y apellido. El nombre es ETA y el apellido es Batasuna. Frente a eso es exigible en primer lugar al señor Ibarretxe que si le queda un gramo de sentido común, una vez que concluya la ronda de conversaciones que está teniendo estos días, inicie otra para ver cómo refuerza la posición de interlocutores sociales, de fuerzas políticas, del conjunto de la sociedad, para ser más eficaces en la batalla contra ETA. Y lo segundo: no es lógico que ante el primer problema que tiene la sociedad española y la sociedad vasca no exista diálogo entre el presidente del Gobierno de España e Ibarretxe.
P. Ustedes han acudido a la ronda con Ibarretxe sobre el plan soberanista. Sin embargo, el PP ha declinado esa invitación.
R. En política, el diálogo es imprescindible. Nosotros hemos tomado la decisión de mirar al lehendakari a los ojos y decirle que está equivocado y que debe rectificar. Nuestro objetivo es acabar con ETA y con la violencia. Respetamos lo que ha hecho el PP igual que hemos pedido respeto para nuestra posición.
P. El PP les atribuyó paro, corrupción y despilfarro para derrotarles. ¿Piensan hacer ustedes ahora lo mismo?
R. Nosotros ganaremos las elecciones sin sembrar España de odio y crispación como hizo el PP. El PP inventó la crispación, y Zapatero, la oposición útil. Esa es nuestra línea de conducta. Ser firmes en la denuncia de la política antisocial, autoritaria y antigua del PP y compartir con el Gobierno aquellos temas que sean de interés general.
P. ¿Cree que el Gobierno del PP está inmerso en casos de corrupción?
R. En estos seis años de Gobierno ha habido una confusión permanente entre lo privado y lo público, lo que está llevando a un proceso de degeneración de la democracia española. Cuando ahora ponemos encima de la mesa el debate sobre las privatizaciones, nos sorprende que haya muchos candidatos del PP, o al menos uno, que quiere que el debate de las privatizaciones siga en el agujero negro.
P. ¿Quién es ese candidato?
R. El señor Rato no quiere que se hable de cómo han colocado a sus amigos al frente de las empresas privatizadas. No quiere que se sepa lo que ha pasado con algunos créditos familiares que seguramente tienen vinculación con el proceso de privatizaciones. No quiere que se sepa por qué el señor Arriola cobra de Telefónica y asesora al presidente del Gobierno y a su vez al PP.
P. ¿Y estas conductas están próximas a la corrupción?
R. Hemos pedido una comisión de investigación sobre las privatizaciones porque queremos hacer de la política algo serio y riguroso. Porque con toda la documentación, conociendo la verdad y el alcance de muchas operaciones, podríamos concluir que detrás del proceso de privatizaciones hay muchos intereses, hay cosas oscuras, y seguramente habrá también corruptelas. Seguramente habrá algún proceso de financiación de algunas actividades o de algunos asesores que trabajan para el PP, porque hay muchas formas de financiar. Si yo contrato un asesor para realizarme una actividad y le tengo que pagar cifras suculentas, lo tengo que hacer con cargo a los presupuestos de mi partido. Si me lo contrata Telefónica con cifras suculentas y me hace el trabajo de forma gratuita, no sé como se le puede llamar a eso...
P. ¿Cómo?
R. Pues es una forma de financiar actuaciones y actividades del PP, seguramente, sin cargo a sus presupuestos.
P. ¿Y eso qué es?
R. Eso es financiación encubierta.
P. ¿La última reunión entre Zapatero, Gaspar Llamazares, José María Fidalgo y Cándido Méndez constituye el comienzo de una estrecha relación?
R. Forma parte de la normalización de las relaciones, de ser capaces de intercambiar opiniones, de ser capaces de compartir proyectos. Por tanto, no va a ser la última. Son unas conversaciones en las que nos sentimos a gusto, en las que se hace un diagnóstico de la situación del país y, sobre todo, combatimos la deriva autoritaria y antisocial del Gobierno.
P. ¿Cuentan con Izquierda Unida para gobernar en municipios y comunidades?
R. Lo hemos hecho muchas veces en base a acuerdos programáticos y lo vamos a hacer en un futuro. Seguramente lo vamos a hacer en Madrid, tanto en el Ayuntamiento como en la Comunidad, donde es muy necesario cambiar las personas y las políticas.
P. ¿No teme la interpretación de Alberto Ruiz-Gallardón de que el PSOE quiere pactar con la mismas izquierda que en el País Vasco no apoya la Ley de Partidos?
R. El señor Ruiz-Gallardón debe saber que en Madrid se necesita un cambio y no un recambio. Me sorprende que una persona que va de moderno y progresista utilice un discurso antiguo y rancio.
P. ¿Consideraría mal resultado electoral no conseguir la alcaldía de Madrid?
R. Consideraría mal resultado que el PSOE no tuviera más votos en el conjunto de España que el PP.
Diseñó el multitudinario acto del pasado domingo en Madrid donde José Luis Rodríguez Zapatero fue proclamado candidato a presidente del Gobierno y donde se gestó lo que los socialistas denominan 'el espíritu de Vista Alegre', que les permite soñar con una inminente victoria electoral para recuperar el Gobierno de la nación.
Pregunta. ¿A qué atribuye el ascenso del PSOE en las encuestas? ¿A los aciertos de su partido o a los errores del Gobierno?
Respuesta. Hay un cambio de tendencia en la sociedad que tiene que ver con el final de un ciclo político. Responde al incumplimiento de muchas promesas que hizo el PP, por ejemplo, la regeneración democrática, la falta de respuesta a problemas que afectan a la gente, y que tiene también que ver con la política autoritaria del señor Aznar. Eso lleva al deterioro evidente del PP, además del barullo interno del Gobierno por la sucesión. No hay cosa que me haga más feliz que ver cómo el PSOE ya no habla de sí mismo, sino de los problemas de la gente. Y al PP le sucede lo contrario. Habla permanentemente de sus problemas.
P. ¿Tiene algún pronóstico sobre la sucesión de Aznar?
R. A nosotros nos da igual quien sea el sucesor de Aznar, e incluso, si no tienen otro mejor, que vuelva a presentarse él. Creemos que la fórmula de que uno elige a todos no es el mejor ejemplo para una sociedad que demanda de los partidos más transparencia y perfeccionar los procesos democráticos. Aznar tiene un Consejo de Ministros en el que todos se están mirando de reojo y eso va en detrimento de la eficacia en la acción de Gobierno.
P. Califique a los sucesores de Aznar. ¿Rodrigo Rato?
R. Un antisocial que sólo ha logrado la subida de precios y la pérdida de poder adquisitivo de la gente.
P. ¿Mariano Rajoy?
R.Un antiguo que nunca se sabe lo que piensa.
P. ¿Jaime Mayor Oreja?
R. Un autoritario que sólo sabe hablar del País Vasco.
P. ¿Alberto Ruiz-Gallardón?
R. Un falso progresista. No llegará.
P. ¿Ángel Acebes?
R. Más que un sucesor es un sucedáneo.
P. Defíname el modelo territorial del PSOE.
R. El Gobierno popular no ha buscado estos años el encuentro para conjugar de forma armónica el desarrollo autonómico. Los socialistas defendemos reformar el Senado para que cumpla con ese papel de armonizar posiciones para la cohesión territorial de España. El Gobierno aprovecha cualquier oportunidad para confrontar.Lo vemos estos días cuando no asume su responsabilidad en el fraude del lino y quiere repercutir su ineficaz gestión en las comunidades. O con la inseguridad ciudadana, al no dar respuesta a las demandas de que haya más policías que garanticen más seguridad. Todo eso da lugar a que parlamentos autonómos propongan tener una policía propia para responder a esa falta de seguridad. Por ejemplo, Baleares, como lo ha reclamado estos días el presidente Francesc Antich.
P. En Baleares los socialistas quieren policía propia y en Madrid los socialistas la rechazan...
R. Lo que ha hecho Antich es llamar la atención al Gobierno de España sobre un problema que tiene Baleares, donde la seguridad ciudadana ha aumentado más de un 20%. Ha dicho que se podía reformar el Estatuto si no se dan respuestas a los problemas de Baleares. Lo que hay que hacer es reformar de una vez el Senado y buscar puntos concretos de cooperación.
P. ¿Hay diferencias en las estrategias del PP y el PSOE para pacificar el País Vasco?
R. Nosotros estamos conjugando firmeza con serenidad, defensa a ultranza del Estatuto de Autonomía, de la Constitución, del Estado de Derecho, con el diálogo democrático. Y el PP debería hacer mayor esfuerzo por el diálogo democrático. No hace todo lo que debería hacer, lo que le es exigible de entendimiento y de diálogo con el Gobierno vasco y todas las fuerzas democráticas.
P. ¿Culpa a Aznar de lo que pasa en el País Vasco?
R. No. Los culpables tienen nombre y apellido. El nombre es ETA y el apellido es Batasuna. Frente a eso es exigible en primer lugar al señor Ibarretxe que si le queda un gramo de sentido común, una vez que concluya la ronda de conversaciones que está teniendo estos días, inicie otra para ver cómo refuerza la posición de interlocutores sociales, de fuerzas políticas, del conjunto de la sociedad, para ser más eficaces en la batalla contra ETA. Y lo segundo: no es lógico que ante el primer problema que tiene la sociedad española y la sociedad vasca no exista diálogo entre el presidente del Gobierno de España e Ibarretxe.
P. Ustedes han acudido a la ronda con Ibarretxe sobre el plan soberanista. Sin embargo, el PP ha declinado esa invitación.
R. En política, el diálogo es imprescindible. Nosotros hemos tomado la decisión de mirar al lehendakari a los ojos y decirle que está equivocado y que debe rectificar. Nuestro objetivo es acabar con ETA y con la violencia. Respetamos lo que ha hecho el PP igual que hemos pedido respeto para nuestra posición.
P. El PP les atribuyó paro, corrupción y despilfarro para derrotarles. ¿Piensan hacer ustedes ahora lo mismo?
R. Nosotros ganaremos las elecciones sin sembrar España de odio y crispación como hizo el PP. El PP inventó la crispación, y Zapatero, la oposición útil. Esa es nuestra línea de conducta. Ser firmes en la denuncia de la política antisocial, autoritaria y antigua del PP y compartir con el Gobierno aquellos temas que sean de interés general.
P. ¿Cree que el Gobierno del PP está inmerso en casos de corrupción?
R. En estos seis años de Gobierno ha habido una confusión permanente entre lo privado y lo público, lo que está llevando a un proceso de degeneración de la democracia española. Cuando ahora ponemos encima de la mesa el debate sobre las privatizaciones, nos sorprende que haya muchos candidatos del PP, o al menos uno, que quiere que el debate de las privatizaciones siga en el agujero negro.
P. ¿Quién es ese candidato?
R. El señor Rato no quiere que se hable de cómo han colocado a sus amigos al frente de las empresas privatizadas. No quiere que se sepa lo que ha pasado con algunos créditos familiares que seguramente tienen vinculación con el proceso de privatizaciones. No quiere que se sepa por qué el señor Arriola cobra de Telefónica y asesora al presidente del Gobierno y a su vez al PP.
P. ¿Y estas conductas están próximas a la corrupción?
R. Hemos pedido una comisión de investigación sobre las privatizaciones porque queremos hacer de la política algo serio y riguroso. Porque con toda la documentación, conociendo la verdad y el alcance de muchas operaciones, podríamos concluir que detrás del proceso de privatizaciones hay muchos intereses, hay cosas oscuras, y seguramente habrá también corruptelas. Seguramente habrá algún proceso de financiación de algunas actividades o de algunos asesores que trabajan para el PP, porque hay muchas formas de financiar. Si yo contrato un asesor para realizarme una actividad y le tengo que pagar cifras suculentas, lo tengo que hacer con cargo a los presupuestos de mi partido. Si me lo contrata Telefónica con cifras suculentas y me hace el trabajo de forma gratuita, no sé como se le puede llamar a eso...
P. ¿Cómo?
R. Pues es una forma de financiar actuaciones y actividades del PP, seguramente, sin cargo a sus presupuestos.
P. ¿Y eso qué es?
R. Eso es financiación encubierta.
P. ¿La última reunión entre Zapatero, Gaspar Llamazares, José María Fidalgo y Cándido Méndez constituye el comienzo de una estrecha relación?
R. Forma parte de la normalización de las relaciones, de ser capaces de intercambiar opiniones, de ser capaces de compartir proyectos. Por tanto, no va a ser la última. Son unas conversaciones en las que nos sentimos a gusto, en las que se hace un diagnóstico de la situación del país y, sobre todo, combatimos la deriva autoritaria y antisocial del Gobierno.
P. ¿Cuentan con Izquierda Unida para gobernar en municipios y comunidades?
R. Lo hemos hecho muchas veces en base a acuerdos programáticos y lo vamos a hacer en un futuro. Seguramente lo vamos a hacer en Madrid, tanto en el Ayuntamiento como en la Comunidad, donde es muy necesario cambiar las personas y las políticas.
P. ¿No teme la interpretación de Alberto Ruiz-Gallardón de que el PSOE quiere pactar con la mismas izquierda que en el País Vasco no apoya la Ley de Partidos?
R. El señor Ruiz-Gallardón debe saber que en Madrid se necesita un cambio y no un recambio. Me sorprende que una persona que va de moderno y progresista utilice un discurso antiguo y rancio.
P. ¿Consideraría mal resultado electoral no conseguir la alcaldía de Madrid?
R. Consideraría mal resultado que el PSOE no tuviera más votos en el conjunto de España que el PP.
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