Maragall da la vuelta a la ley de cajas

Triple envite: preservar la independencia de las cajas de ahorros, forzar que su administración sea más transparente y, sobre todo, dejarles autonomía para que decidan la edad de jubilación de sus consejeros, presidentes y directores generales.

Éstos son los objetivos de la proposición de ley que presentarán mañana en el Parlamento autónomo los socialistas catalanes, anunció ayer en S'Agaró (Girona) el presidente del PSC, Pasqual Maragall. La norma, si concita mayoría en el caserón de la Ciutadella, dará una vuelta completa a una parte significativa de la Ley Financiera que se fragua en la carrera de San Jerónimo.

Una norma autonómica frenaría así parte de una ley de ámbito estatal. Y eso sería así porque, como recuerda la proposición de ley, la Generalitat tiene competencias exclusivas sobre las cajas, según establece en su artículo 12 el Estatuto de Autonomía de Cataluña. En el fondo, la propuesta pretende romper el 'carácter básico' que, a través de la Ley Financiera, el Gobierno del PP -a instancias de Convergència i Unió- ha dado a la limitación de los 70 años de edad.

El Gobierno nacionalista encabezado por Artur Mas se ufana de haber logrado, vía una enmienda de última hora a la Ley Financiera, arañar que los requisitos de edad introducidos por el Gobierno central puedan ser contrarrestados por el catalán. Pero Mas ni ha utilizado esa potestad ni ha desvelado sus intenciones.

Oficialmente, el Ejecutivo de CiU continúa deshojando la margarita, aunque varios consejeros han sugerido que no tienen intención de legislar 'para cuatro o cinco personas', en referencia a los presidentes de las cajas que se verían afectados si se impone el requisito intervencionista de edad máxima de 70 años para ser consejero. El primer afectado sería Josep Vilarasau, presidente de La Caixa.

De hecho, el propio vicepresidente Rodrigo Rato ha atribuido a los nacionalistas de CiU la iniciativa de imponer una norma que supondría la salida de Vilarasau de la primera caja española cuando se renueven los órganos de gobierno de la entidad, a partir del próximo enero (ver EL PAIS de ayer).

'No hemos pactado'

A este respecto, el consejero catalán de Economía, Francesc Homs, presente también en el VIII Encuentro de Economía de S'Agaró organizado por la Fundación Internacional Olof Palme, negó haber presionado al PP para que introdujera límites de edad. 'No hemos tomado ninguna iniciativa ni hemos hecho ningún pacto', aseguró Homs, contradiciendo lo manifestado por Rato y otros dirigentes del PP. Y apostilló: 'Quizá a Maragall le convenga entenderlo así'.

La modificación de la ley de cajas de ahorros de Cataluña (de 1985) que proponen los socialistas, a quienes las encuestas dan por ganadores en las próximas elecciones autonómicas previstas para el año próximo, contempla que sean los estatutos de cada caja los que fijen un límite de edad. 'En caso de ausencia de regulación, se establece automáticamente en la edad de 77 años', especifica. También los estatutos de estas entidades deberían fijar los límites para el director general, y, en su defecto, el tope de edad propuesto será de 70 años.

Otro de los preceptos que quieren introducir los socialistas es un Código de conducta que garantice más transparencia y mejoras a la hora de que las cajas respondan sobre sus cuentas, además de reclamar que se creen las condiciones para que sus consejos de administración puedan controlarlas 'de forma activa, competente e independiente'.

El líder socialista denunció que intereses coyunturales 'puedan crear incertidumbre sobre la marcha de una institución importante' y dar al traste con un modelo que ha funcionado bien.

El PSC desea una toma de posición inmediata del Parlament sin necesidad de esperar a que se haya aprobado la Ley española. Y ello para 'evitar que, al amparo de ciertas posiciones políticas, se adopten medidas que signifiquen una intromisión perjudicial en el ámbito de decisión de las propias entidades'. Maragall precisó que intentaría evitar estas intromisiones y que rectificaría los 'excesos' que se produzcan 'si el pueblo de Cataluña nos da la confianza'.

Interés político

Francesc Homs negó que existan incertidumbres en las instituciones financieras, lanzó un mensaje de tranquilidad a las cajas asegurando que no tienen por qué preocuparse y se confesó sorprendido por la iniciativa del PSC.

Homs retó a Pasqual Maragall a explicar qué interés político esconde su empeño en modificar ahora - 'sólo por una discrepancia', precisó- una ley, la autonómica sobre las cajas, que 'es la envidia' de otras comunidades. Homs insistió en que la mencionada enmienda a la Ley Financiera permitiría al Parlamento catalán revocar el límite de los 70 años: 'Cuando esté aprobada (la ley estatal), el Parlamento de Cataluña ya podrá legislar si quiere', aseguró. Es decir, cuando ya haya pasado todo.