Una planta petrolífera amenaza con hundirse frente a Río

Petrobras, una de las petroleras más importantes del mundo, ha vuelto a hacer saltar las alarmas al empezar a hundirse su plataforma P-34, a 120 kilómetros de Río de Janeiro. La plataforma, un petrolero reconvertido, comenzó a hundirse el domingo y anoche seguía escorada, con 12.000 toneladas de crudo en sus tanques. En marzo de 2001 otra plataforma similar sufrió una explosión en la que fallecieron 11 operarios.

En esta ocasión no ha habido víctimas, ya que al anunciarse que el buque-plataforma se hundía los servicios de salvamento compuestos por nueve navíos y una flota de helicópteros rescataron a las 75 personas que trabajaban en ella. Tampoco parece que se hayan producido vertidos de las 12.000 toneladas de combustible que aloja en sus tanques. Las primeras versiones de la compañía apuntan a que el accidente tuvo su origen en una avería eléctrica que dejó abiertas las válvulas de regulación.

Tampoco se sabe con certeza la inclinación de la nave. Fuentes oficiales aseguraban que es de 34 grados, mientras que para el diario O Globo llegaba ya a los 40. Varios equipos técnicos se han desplazado a bordo para intentar evitar su hundimiento.

El accidente de la P-34 es el segundo de estas características que afecta a una plataforma propiedad de Petrobras en poco más de un año. En el anterior accidente murieron 11 operarios y se produjo un derrame de crudo.

'Estoy orgulloso de Petrobras pero desgraciadamente no cumple los requerimientos ambientales. Más del 80% de sus plataformas carecen de licencia ambiental, entre ellas la P -34', afirmó ayer Carlos Mink, Presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento del Estado de Río de Janeiro.

La P-34 fue construida en Japón hace 43 años. Inicialmente era un petrolero que cubría la ruta entre Oriente Próximo y Brasil. A partir de 1976 se transformó en una unidad de producción petrolífera y de almacenamiento de combustible en varios campos de extracción del Estado de Río de Janeiro. Los 17 compartimentos en que está dividida su bodega pueden almacenar hasta 45 millones de litros, aunque en este momento sólo guarda 12 que intenta bombear Petrobras.

Tiene capacidad para producir 34.000 barriles de petróleo y 195.000 metros cúbicos diarios de gas. Desde que en 1994 fue transformada en plataforma, Petrobras colocó un equipamiento en la proa que le permite perforar a 840 metros de profundidad a partir de la lámina de agua. El accidente se ha producido en plena campaña presidencial y ha repercutido en la bajada de la Bolsa y en el cambio del dólar, que volvió a subir a pesar de las presiones del Banco Central.

El candidato de izquierdas Lula da Silva debe en parte su triunfo en la primera vuelta de las elecciones a las duras críticas lanzadas contra Petrobras, que ha contratado otra gran plataforma en Singapur. Como el desempleo es un tema clave en los debates, Lula reclama su construcción en el propio Brasil para crear puestos de trabajo.