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La comunidad argelina en Alicante pide que se le permita abrir negocios

El gobierno de Luis Díaz Alperi mantiene en suspenso cautelar las licencias de apertura

El presidente de la asociación Hispano-Argelina en Alicante, Brahim Boulfrakh, reclama que el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación firmado entre los dos países el pasado martes en Madrid, sea orientado a mejorar la integración de los inmigrantes procedentes de ese país magrebí. Boulfrakh denuncia el 'racismo soterrado' que padece la colonia argelina en Alicante y pide al Ayuntamiento que levante el veto a los negocios argelinos.

En declaraciones a la agencia EFE, Boulfrakh consideró que el acuerdo estratégico firmado en Madrid por el presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, y el jefe del Gobierno español, José María Aznar, hace que en estos momentos las autoridades tengan 'más simpatía' hacia esta comunidad, lo que a su juicio debería ser aprovechado para acelerar la integración.

Boulfrakh recordó que Alicante cuenta con una de las principales colonias de argelinos en España, con unos 3.000 residentes en la provincia, un tercio de ellos en la capital, mientras que alrededor de 180.000 pasan en algún momento del año por la ciudad, principalmente para utilizar el transbordador con Orán.

Denunció que en la provincia existe un soterrado fomento del racismo por parte de algunos sectores, y añadió que, por ello, las autoridades españolas deberían centrar sus esfuerzos en combatir estas actitudes excluyentes.

Agregó que sería un paso adelante que el Ayuntamiento de Alicante reanudara la concesión de licencias para la apertura de nuevos establecimientos en el centro tradicional de la ciudad, concretamente en el entorno de la calle San Francisco, ante la demanda de muchos argelinos.

La suspensión cautelar de licencias ha generado una polémica en el Ayuntamiento alicantino. El gobierno que preside Luis Díaz Alperi, del PP, presionado por un grupo vecinal, ha rechazado varias iniciativas de la comunidad argelina y de los grupos de la oposición municipal para que levante el veto a la concesión de licencias de apertura de locales en las calles del centro tradicional de la ciudad. En la última década han proliferado en estas calles locutorios telefónicos regentados por argelinos, bazares y otros establecimientos comerciales de los que se surten millares de personas que arriban desde Orán para realizar sus compras. 'Queremos que el acuerdo entre Madrid y Argel facilite que el Gobierno nos apoye para conseguir la integración y se nos trate igual que a las demás comunidades', demandó Boulfrakh.

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