El Gobierno y el PSOE piden que se retire el proyecto tras el rechazo de los empresarios

El Gobierno, el PP y el PSOE pidieron ayer al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que retire su propuesta de libre asociación de Euskadi al Estado tras el rechazo manifestado por los empresarios vascos. El presidente del Gobierno, José María Aznar, alertó en Barcelona sobre las consecuencias económicas que tendría esa propuesta soberanista para el País Vasco. Existe 'un campo de juego anchísimo en el que nos hemos movido hasta ahora con comodidad', dijo Aznar y lamentó que 'ahora, 25 años después, haya gente que dice que lo que se acordó entonces, y que ha tenido un éxito razonable, no vale'.

El presidente del Gobierno consideró que tan 'inverosímil' como el federalismo asimétrico que propugna el PSOE es plantear un 'estado asociado' como el que propone el lehendakari Juan José Ibarretxe, y reiteró que es 'moralmente inaceptable' que 'haya gente que diga que se va a saltar las reglas' y 'actúe como si el terror no existiese'.

El secretario general del PP, Javier Arenas, aconsejó por su parte a Ibarretxe que 'debería estudiar bien la lección' que le han dado los empresarios vascos. 'En mi opinión, le han venido a decir que con propuestas disparatadas, con rupturas constitucionales y con proyectos independentistas que no van a ninguna parte se está poniendo en cuestión el futuro económico, la creación de empleo y las pensiones en el País Vasco', declaró Arenas a RNE.

En la misma línea se expresaron el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, y el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, quien recordó que, además de los empresarios, los partidos de la oposición, los sindicatos y sectores de la sociedad -en referencia al rector de la Universidad del País Vasco, Manuel Montero- también han dicho 'no' a una propuesta 'independentista'.

'Baño de realismo'

El portavoz del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, se sumó a las críticas y comentó que Ibarretxe 'está recibiendo un baño de realismo' con la respuesta que le ha dado Confebask. Caldera pidió al lehendakari que reflexione ante tantos sectores que le dicen que su plan 'además de ser inviable, rompe la convivencia y acarrearía costes sociales y económicos muy serios' .

En el mismo sentido, el secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, opinó que 'el lehendakari está acumulando motivos para reflexionar y retirar su iniciativa'.

López añadió: 'Ya no somos sólo los partidos políticos de la oposición, sino la sociedad vasca a través de sus representantes, esa sociedad de la que el lehendakari esperaba conseguir legitimidad, la que se opone a la propuesta y dice que no es el camino ni la solución, sino que se agrava la situación'.