Ibarretxe incluye a Batasuna en la negociación de su plan soberanista

El presidente del Gobierno vasco, Juan José Ibarretxe, levantará este mismo mes el veto que había impuesto a Batasuna en cumplimiento de su compromiso electoral de no contar con la formación que lidera Arnaldo Otegi mientras no condenara a ETA. El lehendakari incluirá a representantes de esta formación, cuyas actividades han sido suspendidas judicialmente por el magistrado Baltasar Garzón, en la ronda de encuentros bilaterales con los partidos que anunció el viernes pasado en el Parlamento de Vitoria para debatir su proyecto soberanista. Fuentes de Ajuria Enea reconocieron que este hecho rompe la pauta seguida hasta ahora por Ibarretxe, pero lo justificaron: 'Éstas son unas circunstancias políticas diferentes'.

El compromiso de no contar con Batasuna, entonces Euskal Herritarrok, mientras no se apartara de ETA, fue una de las promesas básicas de la campaña electoral de Ibarretxe en los comicios autonómicos de 2001. 'Si EH-Batasuna no tiene una actitud de participar de manera normalizada en la política, si no tiene una actitud de rechazo de la violencia, no se puede establecer un diálogo normalizado con EH-Batasuna', declaró en una entrevista con este periódico tres días antes de los comicios.

De hecho, el lehendakari sólo recibió a los representantes de Batasuna en la primera tanda de contactos protocolarios tras tomar posesión en julio de 2001, y fue para zanjar la relación institucional con ellos en tanto no condenara a ETA y sus asesinatos. Con posterioridad, Arnaldo Otegi volvió a Ajuria Enea con ocasión de la crisis de los Presupuestos, tras participar con el PP y el PSE en un plante parlamentario que paralizó la tramitación de las cuentas autonómicas. Ibarretxe se sintió entonces legitimado a recibir a los radicales, por entender que la oposición estaba usando sus votos para bloquear al Gobierno.

EH, y luego Batasuna, fueron excluidas del resto de los encuentros, lo mismo bilaterales que en foros colectivos, como los que alumbraron la Mesa de Arkaute o el acuerdo municipal en defensa de los amenazados y de la pluralidad. También fueron excluidos de la Mesa del Parlamento.

Las fuentes consultadas admiten que la decisión de Ibarretxe rompe ese principio por el que el lehendakari se ha regido desde las elecciones de 2001, de no hablar con Batasuna en tanto no condenara a ETA. 'Éstas son, de facto, unas circunstancias políticas diferentes', que aconsejerían a Ibarretxe contar en principio con todas las fuerzas políticas y sociales, 'sin vetos y sin exclusiones, como dijo en su discurso', argumentan.

'Deseo adelantarles que es mi intención iniciar, a partir de la próxima semana, encuentros bilaterales con todas las fuerzas y sensibilidades presentes en esta Cámara', rezaba el texto escrito que se entregó de la intervención del lehendakari en el pleno parlamentario del viernes pasado. Al leerlo, Ibarretxe omitió la palabra 'todas', pero finalmente todas estarán.

Las mismas fuentes de Ajuria Enea aclararon que no consideran un obstáculo la suspensión judicial de Batasuna impuesta por el magistrado Baltasar Garzón. La intención es buscar una fórmula que no colisione con la decisión de la Audiencia Nacional. Esto es, el diálogo se restablecería probablemente a través del grupo parlamentario o con alguno de los miembros de Batasuna a título individual.

En todo caso, Ibarretxe piensa, al contrario de lo que indicó en el Parlamento, retrasar sus encuentros con los partidos y recibirá primero a entre quince y veinte representantes del mundo social, sindical, empresarial, educativo y cultural. El lehendakari ha preferido invertir el orden de los encuentros para que los partidos puedan 'tomar distancia' y contar con el parecer de 'otros agentes'.

Ajuria Enea trabajaba ayer en la preparación de distintas citas. Entre los primeros en ser recibidos estarán los representantes empresariales, sumamente preocupados.

En contraste con la decisión de Ibarretxe de incluir a Batasuna en estas conversaciones, los representantes del PP y el PSE en la comisión parlamentaria sobre la Convención Europea se han negado a viajar a Bruselas por haberse admitido en la delegación a un diputado de Batasuna. Tampoco IU ha enviado a su representante, en este caso aduciendo razones de agenda de sus parlamentarios, por lo que la delegacion que desde hoy mantiene diversos encuentros en la capital de la UE ha quedado reducida a las fuerzas nacionalistas PNV, EA y la suspendida Batasuna.

Mesa de Arkaute

El consejero de Interior, Javier Balza, convocó ayer una reunión urgente de la Mesa de Arkaute, el foro de seguridad en el que participan los partidos políticos a excepción del PP y de la suspendida Batasuna, para 'analizar conjuntamente' las amenazas vertidas por ETA contra las sedes y los actos públicos del PP y el PSOE en su último comunicado, informa Aitor Guenaga. El socialista Víctor García había solicitado por carta esta reunión, y Balza, tras consultar con el lehendakari, decidió convocarla.