El CSN debate hoy un plan de cierre programado para Zorita

La central nuclear José Cabrera, de Almonacid de Zorita (Guadalajara), tiene los días contados. PP y PSOE están de acuerdo en que se decida ya el cierre y siga funcionando unos tres años más. Pero los dos partidos quieren dejar que sean los cinco componentes del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), donde cada grupo propuso a dos de sus miembros, el que tome la decisión, probablemente en la reunión de hoy.

Las conversaciones entre PP y PSOE, que empezaron 'después de verano', según fuentes cercanas a la negociación, no pueden tardar mucho en llegar a una conclusión: el permiso de Zorita, que empezó a funcionar en 1968 y disfruta de una prórroga desde 1999, acaba el próximo 15 de octubre. Ambos partidos fueron ayer más claros en sus posturas, después de que se supiera que llevaban tiempo discutiendo el cierre de la central.

El presidente del PP en Castilla-La Mancha, Luis de Grandes, y el futuro candidato popular al Gobierno de la comunidad, Adolfo Suárez Illana, declararon ayer en Guadalajara que si el Ministerio de Economía concede una nueva prórroga a la central, ésta debería ser 'la última'. Los políticos populares insistieron en que antes de tomar una decisión hay que esperar al 'dictamen técnico' que debe elaborar el CSN.

El portavoz socialista en la comisión de Energía del Congreso, Javier García Breva, fue ayer más tajante y afirmó que lo que debía aprobar el CSN no era 'una nueva prórroga de Zorita, sino un plan de cierre controlado' ºque debería comenzar 'el mismo 16 de octubre'.

Se llame 'última prórroga' o 'cierre controlado', el resultado es igual. Salvo cambios de última hora Zorita funcionará unos tres años más pero no llegará a los 40 de vida útil que reclaman su propietaria, Unión Fenosa. En ese periodo, la central tendrá que elaborar un plan de cierre, y conseguir el visto bueno del CSN 'y es posible que hasta del Consejo de Ministros', afirmó García Breva. En cualquier caso, el V Plan de Gestión de Residuos Nucleares, de 1999, establece que, una vez parada una central, deben pasar tres años hasta que se inicie su desmantelamiento.

El diputado socialista admitió que este proceso llevaría un tiempo, 'y más teniendo en cuenta que se trata de la primera vez que en España se procede al cierre programado de una central nuclear'. 'Lo que no puede repetirse de ningún modo es lo que ha ocurrido con la de Vandellòs I [Tarragona], que se paró por un incendio en 1989 y empezó a desmantelarse en 1998', afirmó García Breva. El diputado descartó que la postura socialista implicara adelantar el cierre de otras centrales, como la de Santa María de Garoña (Burgos), que tiene permiso hasta 2009.

La plataforma Zorita Ni Un Año Más ha convocado una manifestación hoy frente al CSN para pedir el cierre inmediato. El responsable de las campañas de Energía de Greenpeace, Carlos Bravo, insistió en los fallos de la central, y declaró que se debe aprovechar que Zorita está parada para cargar combustible 'y no dejarla arrancar nunca más'. 'La recarga es un chantaje al CSN para conseguir una prórroga', afirmó.