América Latina cae por la cuesta de la recesión

Empujado por el efecto contagio de la crisis de Argentina y por un adverso escenario externo, el PIB de las economías de América Latina experimentará una caída del -0,8% en 2002, en un año de recesión con el que se completa 'media década perdida', desde el inicio de la crisis asiática. La contracción que viven los países de esta región del mundo es generalizada y, para encontrar un precedente de magnitud superior, hay que retroceder hasta la crisis de la deuda externa de los años ochenta.

En 11 de 18 países, entre ellos Argentina y Brasil, dos de las tres mayores economías, habrá desaceleración en 2002 respecto del año pasado

Un panorama sombrío bosquejó el secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el colombiano José Antonio Ocampo, al dar a conocer en Santiago un estudio con las proyecciones anuales de este organismo de la ONU. En 11 de 18 países latinoamericanos, entre ellos dos de las tres mayores economías regionales, Argentina y Brasil, habrá una desaceleración económica en 2002 respecto del año pasado. El PIB por persona de la región será en diciembre un 2% inferior al de 1997, lo que implica un quinquenio íntegro dilapidado desde la perspectiva del crecimiento económico.

La mayor caída la protagonizará Argentina, donde la Cepal estima una recesión de magnitud mayúscula, con un PIB que se hundirá este año un -13,5%. El grueso de la caída ocurrió entre el segundo semestre de 2001 y el primer trimestre de 2002, periodo en que el PIB cayó un 16,3% respecto del año anterior. Pero ya aparecieron los primeros signos de que pasó la peor parte de la crisis y Argentina tocó fondo, según el estudio: el tipo de cambio se estabilizó y se frenaron la caída del PIB y la inflación, mientras la balanza comercial muestra un superávit que se comienza a reflejar en las reservas.

Malos pronósticos

Aunque el efecto contagio de la crisis argentina llegó a Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay, ha sido este último país el más golpeado. La Cepal pronostica que el PIB de Uruguay caerá un 5% debido a una baja en sus exportaciones del 32%, el aumento del riesgo país, la pérdida de reservas y los retiros masivos de depósitos. El organismo estima que Argentina reducirá a un tercio sus compras de los socios del Mercosur, desde 6.500 millones de dólares en 2001 a poco más de 2.200 en 2002.

El efecto comercial de la crisis argentina es sólo la punta del iceberg. En materia financiera, la recesión de este país ha influido en una mayor reticencia del capital externo para llegar a América Latina, lo que encareció los créditos para Brasil y Uruguay al aumentar su riesgo país.

En el lado opuesto de la balanza se encuentra Perú, la economía latinoamericana que más crecerá en 2002, con una modesta expansión del PIB del 3%. También la Cepal espera un repunte en el segundo semestre de México, en brazos de un aumento de sus exportaciones a Estados Unidos, mientras Chile crecerá un 2,5%, un desempeño elevado en el contexto latinoamericano, pero inferior al que este país tuvo en 2001.

La desaceleración generalizada de las economías de América Latina en los últimos cinco años se explica, según la Cepal, por la huida de los capitales de la región. En 2002, por cuarto año consecutivo, la región sufrirá una salida neta de recursos al exterior, mientras la inversión extranjera se ha tornado más esquiva. Para este año se proyecta un ingreso de capitales a América Latina en torno a 50.000 millones de dólares, bastante menos que los 74.000 millones anuales que entraron en promedio entre 1996 y 1998.