Osakidetza mantiene el expediente a dos médicos por crear "alarma"

La responsable del centro de salud de Sansomendi, en Vitoria, destituida tras negarse a centralizar los datos de historiales clínicos sin consentimiento previo de los pacientes, ha presentado un recurso para que Osakidetza la restituya en el cargo. La doctora, que sigue trabajando en el centro aunque con otras funciones, ha recibido junto a otros dos compañeros suyos el amparo profesional del Colegio de Médicos de Álava. Osakidetza, sin embargo, mantiene el expediente contra ella y otro facultativo por entender que crearon 'alarma' entre la ciudadanía.

El sistema Osabide de centralización de historiales clínicos que está implantando Osakidetza ha chocado con las reticencias de algunos profesionales y pacientes. El centro de salud de Sansomendi ha sido un claro ejemplo. Allí, el Servicio Vasco de Salud quiso instalar el programa informático a primeros de abril. Sin embargo, la responsable del ambulatorio se negó a ponerlo en práctica porque entendía que antes de introducir los historiales clínicos en una sola base de datos para todo el País Vasco era necesario pedir el consentimiento previo de los pacientes. Al día siguiente, María Paz P. G. fue destituida de su cargo, obtenido mediante oposición pública.

Osakidetza la mantuvo trabajando en el centro, pero colocó a un nuevo responsable, Enrique M., al frente del centro de salud, que sí instaló el sistema. En un principio, además de la jefa, hubo otros tres médicos de Sansomendi que se negaron a introducir los datos de los pacientes dentro del sistema Osabide. Dos de ellas, interinas, decidieron más adelante acatar la directriz de la dirección de Osakidetza y centralizar los datos de los pacientes. El tercero, Ángel R. T., sigue aún con su negativa. Tanto él como la ex responsable mantienen una dura pugna con el Servicio Vasco de Salud por lo que consideran un problema de objeción de conciencia. En ese sentido, ellos dos ya han recibido el amparo profesional del Colegio de Médicos de Álava, que lo ha hecho extensivo a una de las interinas, María Pilar B. A. En su decisión, el Colegio criticaba a Sanidad por extender Osabide 'sin consultar con los profesionales, ni usuarios, ni con los colectivos y colegios afectados'.

Osakidetza no ha atendido de momento el amparo del Colegio. Continúa con el expediente abierto a los dos médicos. En una nota remitida por el director de Asistencia Sanitaria, Jon Darpón, asegura que el Servicio Vasco de Salud 'no ha expedientado a ningún médico por negarse a que las historias clínicas de los pacientes se integren en Osabide', sino que 'inició un expediente informativo el pasado 15 de mayo para esclarecer si dos médicos de un centro de salud de Álava reiteradamente daban información errónea sobre ese sistema al objeto de alarmar a los ciudadanos y así continuar trabajando con una aplicación informática diferente'. Sansomendi estaba reconocido como uno de los centros punteros en España en cuanto a organización e informatización de sus redes internas. Utilizaba el programa OMI-AP.

Los médicos afectados defienden lo contrario que la empresa. Aseguran que el motivo del expediente es su negativa a introducir los datos de los pacientes sin que éstos estuvieran advertidos. Y aclaran que los expedientes no son informativos, sino 'disciplinarios'. Además, rechazan que hayan buscado propagar la alarma social.

Debate entre los médicos

Los médicos expedientados ya han presentado los recursos pertinentes. En concreto, la ex responsable del centro de salud ha pedido, mediante un recurso de alzada, su restitución en el cargo, extremo éste que no quiso confirmar Sanidad porque 'hasta que no concluya la instrucción no consideramos oportuno entrar en ningún debate'. La consejería matiza, eso sí, que 'no está destituida como médico, sino como responsable del centro, cargo que no es en propiedad'.

El sistema Osabide ha despertado el debate entre los usuarios y los profesionales. De hecho, la junta directiva del Colegio de Médicos de Vizcaya ha emitido una nota, aprobada por unanimidad, en la que alerta -sin citar el programa en concreto- sobre los riesgos de la concentración de historiales clínicos. 'Cuando la concretración de datos los hace codiciables', advierten los médicos vizcaínos, 'la amenaza a la confidencialidad que se crea, exige una total transparencia en este tipo de iniciativas, con sanción por grupos independientes (científicos, profesionales, judiciales, políticos, ciudadanos, económicos y comerciales) en cuanto a la pertinencia y relevancia de los datos precisos, considerando que basta una única fuga en un único punto para que los daños sean catastróficos e irreparables'.

Ante esta declaración y el caso del amparo producido en Álava, Osakidetza responde que no le consta 'que hayan mostrado dudas respecto a la confidencialidad y seguridad de los datos'. Y asegura que Osabide se ha implantado en '143 centros de salud' y da servicio 'a aproximadamente la mitad' de la ciudadanía vasca 'sin que haya habido problemas'.