'Contra la escuela pública'
'Segregador. Excluyente. Y perjudicial para la escuela pública'. Así calificó ayer la oposición el proyecto de la Ley de Calidad aprobado por el Consejo de Ministros.
Desde el PSOE, la portavoz de Educación de la Ejecutiva socialista, Carme Chacón, señaló que 'esta ley es un claro exponente de la política antisocial del Ejecutivo del PP'.
Chacón denunció que el Gobierno se haya rendido ante el fracaso escolar y opte por segregar a los alumnos con problemas de aprendizaje a los 12, a los 13 y a los 14 años. 'Es una separación demasiado temprana e injusta que reducirá el número de bachilleres y de universitarios', dijo Chacón.
La portavoz socialista también criticó que la ley recorte la participación de las familias en los centros educativos y que los directores sean escogidos 'a dedo' por parte de la Administración.
Respecto a la ausencia de memoria económica que acompañe al proyecto, Chacón aseguró: 'La memoria económica existe. Nadie puede imaginar que se elabore una ley y no se sepa lo que cueste. La ministra esconde la memoria porque sabe que beneficia escandalosamente a la privada'.
Izquierda Unida consideró que el proyecto de Ley de Calidad 'enfrenta' a la enseñanza pública con la privada y supone un retroceso respecto a las conquistas logradas en los últimos años en materia de enseñanza. El dirigente de la coalición, Gaspar Llamazares, señaló que esta ley representa a 'una minoría de los españoles que no quieren que la enseñanza pública sirva para igualar a la sociedad española'.
Y añadió que este proyecto es un 'grave error' que demuestra que la ministra Pilar del Castillo y el presidente del Gobierno, José María Aznar, 'desprecian' la opinión de los ciudadanos expresada en las manifestaciones de este año contra la ley.
'No es más que una ley de contrarreforma de la enseñanza pública, una ley partidista y una ley del Partido Popular', aseguró.
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