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Aznar admite que Zapatero se consolidó en el debate de la nación

'Yo no voy de concursante, no compito, voy de proyecto, ya saldrá nuestro concursante'

Javier Casqueiro

Un joven de Nuevas Generaciones del PP preguntó ayer a José María Aznar por el nuevo estilo de José Luis Rodríguez Zapatero, más duro y de izquierdas. El presidente empleó más tiempo que nunca para hablar de su adversario y admitir que Zapatero se 'consolidó y avanzó pasos' dentro del PSOE con su intervención en el debate de la nación. De paso, intentó contrarrestar la herida de su presunta derrota en ese duelo al afirmar con tono displicente que ya no compite en ningún tipo de Operación Triunfo: 'No voy de concursante, voy de proyecto, de ideas; ya saldrá nuestro concursante'.

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Aznar pronunció ayer una breve conferencia en los cursos de verano de El Escorial sobre los siete apartados de reformas centristas que revalidó en el debate sobre el estado de la nación y que ya refrendó el PP en su XIV Congreso Nacional el pasado enero. No aportó ninguna novedad y volvió a destacar que ese 'proyecto ambicioso para situar España entre las democracias más avanzadas del mundo' le trasciende a él como presidente y que, por tanto, debe continuar tras las elecciones generales de 2004, a las que ya no se presentará.

En el coloquio posterior, Aznar admitió variados tipos de preguntas de los alumnos, abrumadoramente jóvenes dirigentes del PP, y se explayó en las contestaciones como jamás lo hace cuando le interrogan periodistas.

Un afiliado de Nuevas Generaciones le sondeó sobre el nuevo estilo de alternativa de Zapatero. Y no mencionó el debate de la nación. Pero Aznar sí lo hizo para intentar sacarse ahora esa espina. Primero quiso descalificar a la oposición por la 'retahíla y enciclopedia de insultos' que le han dedicado en los últimos meses a él y a sus ministros y que ha mandado recopilar. Aludió expresamente a la acusación contra el anterior ministro portavoz, Pío Cabanillas, como 'mentiroso mayor del reino' por negar la existencia de la huelga a las ocho de la mañana del pasado 20 de junio, y subrayó que ahora la Seguridad Social ha demostrado que sólo se le descontó el salario por no trabajar ese día al 11% de los trabajadores.

Aznar se refirió sin más al líder del PSOE para aceptar que con su tipo de intervención en el debate 'probablemente haya avanzado en el partido, y eso es lo que le importa y yo lo entendería. Ha dado pasos adelante en el interior de su partido para el futuro y para otras cosas'.

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Sin proyecto ni alternativas

Aznar explicó ayer el ánimo y el espíritu con el que acudió al gran debate anual en el que el Gobierno rinde cuentas: 'Al debate yo no voy de concursante, yo voy de proyecto, de ideas; ya saldrá nuestro concursante. Él trabajó para intentar consolidarse en su partido y le deseo suerte, pero proyecto político y alternativas, no hay'. El presidente aprovechó su análisis del comportamiento de Zapatero para profundizar en la estrategia del Gobierno y el PP de presentarle ahora como un líder radical: 'Me llama la atención su renuncia a ocupar el centro político'.

El jefe de Gobierno recordó que en España ese deslizamiento del PSOE hacia la izquierda 'estéril' ya se intentó en las elecciones de 2000 con el pacto con IU y fue un fracaso, como cree que se ha constatado en estos años en otros países europeos. Entiende, sin embargo, que por Europa son las ideas copiadas del PP 'las que barren'. Para remachar más si cabe esa línea descalificativa de Zapatero, Aznar contó que ha mandado estudiar las propuestas de resolución que presentó el PSOE en ese debate y que su coste asciende a 'dos o tres billones de pesetas, entre 12.000 y 18.000 millones de euros'. El presidente entiende que 'no se puede decir a todo el mundo que sí' y que ese dinero debe salir de algún lado o del endeudamiento. Y aunque corroboró que él ya no compite ni concursa sí quiere pensar seriamente en el futuro, de España y del PP.

Aznar comentó, sobre la reciente crisis con Marruecos por el islote de Perejil, que España hará esfuerzos por estabilizar de buena fe unas relaciones 'que nunca han sido fáciles', aunque vaticinó que para ello habrá que dar 'tiempo al tiempo'.

El presidente José María Aznar, ayer, en El Escorial.
El presidente José María Aznar, ayer, en El Escorial.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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