¡Comer y rascar, todo es empezar!

Hirukide agradece el esfuerzo que el Gobierno Vasco ha hecho ampliando el presupuesto de 89 millones a 96 millones de euros (unos 16.000 millones de pts.), pero a pesar de que somos la Comunidad Autónoma pionera en medidas de apoyo a la familia seguimos a la cola de nuestros países vecinos.

El pasado martes la Consejería de Azkarraga aprobó las medidas económicas y fiscales, así como de conciliación laboral y familiar incluidas en el Plan Integral de apoyo a las familias con hijos, quedándose en el tintero las medidas educativas por discrepancias y falta de acuerdo entre los Ayuntamientos y Gobierno Vasco.

Mientras tanto, las familias numerosas estarán otro curso más en 'listas de espera' para que puedan admitir a sus hijos en escuelas infantiles y guarderías cuando por ley tienen prioridad de acceso. (Ley 25/1971 de protección a las familias numerosas en su artículo 10.1.b. dice que: 'Los miembros de familias numerosas gozarán del derecho de preferencia en el acceso a centros de enseñanza, en igualdad de rendimiento educativo....reservando un 10% de las plazas disponibles'.

Desde luego que hemos pasado de la noche al día en cuanto a la presencia de Política Familiar en Euskadi, pero en lo que nos compete a las familias numerosas, tan sólo se van a poder beneficiar de estas ayudas aquellas familias, cuyo tercer hijo y sucesivos, tengan menos de cinco años o lo que es lo mismo que hayan nacido de 1998 en adelante. (Esto es como si te dan la entrada para un coche y luego no puedes mantenerlo porque no te llega para gasolina). Sin minusvalorar la voluntad política de hacer un mayor hincapié en los partos múltiples, haciéndose un esfuerzo económico desde Hacienda para incluir a los nacidos desde 1993 con ayudas hasta los diez años.

En definitiva, las asociaciones familiares no descansaremos hasta conseguir que 'nos devuelvan los impuestos que pagamos demás', llamando a la puerta a todos los departamentos que nos competa (educación, vivienda, transporte, ...) hasta lograr que haya un órgano que coordine, el Instituto Vasco de la Familia, para que no se traspapelen nuestras peticiones en las distintas consejerías, y poder llegar así a lo que en Francia, Bélgica, Alemania, etc. se destina a la Familia.

Al igual que nos suben la gasolina porque somos Europeos y no protestamos, lo somos también para lo bueno, para conseguir el envidiable Bienestar Social que poseen las familias europeas.