Reorganización gubernamental
Tras estar durante meses intentando movilizar a las numerosas agencias federales en un frente único de lucha contra las amenazas terroristas en EE UU, el presidente Bush le ha contado al país que para hacer esta tarea se necesita realizar una ambiciosa reorganización del Gobierno. Es lógica su propuesta de poner juntas más de una docena de agencias federales en un nuevo Departamento de Seguridad Nacional.
No se deben subestimar los obstáculos que se pueden encontrar para lograr la mayor revisión de la maquinaria federal hecha desde los años cuarenta con Harry Truman. Va a ser necesario un grado de liderazgo y cooperación raros en Washington. (...) A la hora de examinar la propuesta de Bush, el Congreso debe tener cuidado para no crear nuevos problemas y no generar nuevas batallas. (...) Bush apeló a todos los agentes de ley para que informaran de las sospechas de posible actividad terrorista que tuvieran, y a sus jefes para que se tomaran estas informaciones en serio. También aseguró en su alocución que no creía que nadie hubiera podido prevenirse contra el horror del 11-S. Es difícil no reconocer que este comentario, así como el propio anuncio de la reorganización gubernamental, son una respuesta a los recientes y comprometedores descubrimientos. (...) Queda la impresión de que la Casa Blanca ha hecho el plan muy a última hora. Bush ha mostrado, al tomar la decisión, flexibilidad y deseo de cambiar de camino. (...) Está en manos del Congreso que esto se haga con efectividad y dando la máxima oportunidad al escrutinio y supervisión públicos.
Nueva York, 7 de junio
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