Robado un corzo de bronce de un conjunto escultórico en Arturo Soria

Los técnicos que revisan el estado de los monumentos de la capital se encontraron ayer con una sorpresa en una de sus visitas rutinarias. El conjunto escultórico dedicado a la fauna ibérica -formado por un corzo, una cabra montesa y un muflón- que hay en la confluencia de las calles de Arturo Soria con López de Hoyos amaneció con una pieza menos. Faltaba el corzo. Uno o varios individuos sustrajeron la noche anterior la escultura de bronce, según el edil de Rehabilitación Urbana, Sigfrido Herráez. Pero nadie vio ni oyó nada, a pesar de que el caprínido es de tamaño natural y estaba anclado al suelo.

Fuentes de la comisaría de Ciudad Lineal se enteraron del robo por la denuncia que presentó ayer uno de los técnicos contratados por el Ayuntamiento para revisar los monumentos. 'Vamos a esperar unos días por si la policía consigue recuperar el corzo. Si no, tendremos que poner una réplica, que costará unos 24.000 euros', advirtió Herráez. 'Va a ser muy difícil que aparezca, porque no ha habido testigos', añadió el edil, que espera, sin embargo, la pronta resolución del misterio.

'Nunca había pasado nada así con estas esculturas. Ahora abriremos las diligencias pertinentes para esclarecer los hechos', apuntaron fuentes de la comisaría de Ciudad Lineal. Medios de la investigación agregaron que el ladrón podría haber sido desde alguien que luego funde la pieza para vender el bronce hasta alguien que quiere decorar con el corzo el jardín de su casa.

El conjunto escultórico, del que ahora quedan dos piezas, fue realizado por los hermanos Carazo. El Ayuntamiento lo instaló en la calle de Arturo Soria a principios de los años noventa, junto a otras seis esculturas dedicadas también a la caza mayor.