El 'muestreo' de los créditos y las calificaciones dudosas
Las duras calificaciones que el Banco de España dirige a los responsables de la gestión de la Caja de Guadalajara están basadas en los análisis de operaciones concretas y en el estudio de 'muestras' para determinar la calidad de los créditos concedidos.
La autoridad monetaria encuentra decisiones de gestión cuestionables en ambos casos. Así, menciona casos concretos, como la la división del riesgo contraído con una sociedad denominada Explotaciones el Trebolar, sin tener en cuenta que su operativa responde a las decisiones del grupo Morales o la no comprobación de desfases que asume la entidad (1,76 millones de euros) sin constatar su veracidad.
Pero, además, los inspectores ponen reparos al examen de los créditos analizados. En un muestreo de 110 expedientes, con un importe de riesgo crediticio de 135,9 millones de euros, el Banco de España recomienda reclasificar a dudosos (lo que obliga a realizar provisiones) 0,37 millones e incrementar la cobertura por insolvencias en 0,17 millones. Pero lo significativo es que, además, señala que 37 créditos por importe de 40,29 millones de euros 'presentan significativas debilidades que, de acentuarse, obligarían a su clasificación, también, como dudosos'.
Una de las recomendaciones del Banco de España muestra el calado del problema: 'El consejo de administración', recomienda la inspección, 'ha de exigir y facilitar la implantación de una organización y una metodología de trabajo que fomente la formación de equipos eficientes, las decisiones colegiadas y el control interno, y debe ejercitar sus deberes de gobierno y administración de la entidad (...) vigilando la gestión impartida por el equipo directivo, a quien habrá de requerir la realización de cuantas gestiones sean precisas para la firme defensa de los prioritarios intereses de la caja'.
