'Si viene el rector a cantar, encantados'
El manejo de 50 'excelentes' voces es la labor que ocupa en los últimos años al tolosarra Enrique Arzua, director del coro de la UPV, agrupación que celebra este año su 25 aniversario. Arzua, profesor de la Escuela Superior de Música de San Sebastián, destaca la calidad y el valor de un grupo abierto a la participación de toda la comunidad universitaria, rector incluido.
Pregunta. ¿Qué diferencia existe entre dirigir voces y dirigir instrumentos musicales?
Respuesta. La principal es que el material sonoro es diferente. Aunque las voces son instrumentos también, sus características son distintas. Pero lo que importa es tener las cosas claras sobre qué quieres y cómo quieres interpretarlo.
P. ¿La UPV tiene buena voz?
R. ¿El coro? Tiene unas voces excelentes. Es un coro muy versátil, compuesto por gente joven, con una formación cultural sólida, por lo que el trabajo es ágil y rápido.
P. Con la fama de buenos cantantes que tienen los vascos, no habrá tenido problemas para encontrar miembros del coro entre la comunidad universitaria de la UPV.
R. Tenemos problemas para encontrar chicos, o, mejor dicho, nos gustaría tener más, pero esto no es una cuestión que ataña únicamente a nuestro coro, es algo endémico. Es un asunto cultural. Las preferencias de los chicos suelen ser otras.
P. ¿Qué se requiere para entrar en el coro?
R. Lo que se pide es disposición para ensayar dos días a la semana y un mínimo de voz y oído. Y sobre todo ganas de cantar. Eso sí, hay que ser miembro o haber formado parte de la UPV. La mayoría del coro actual son estudiantes y ex estudiantes, pero también tenemos entre nosotros a algún profesor y algún miembro del personal de servicios. Está invitada toda la comunidad universitaria, y como si viene el rector a cantar, nosotros encantados.
P. ¿Y para dirigirlo?
R. Dos cosas: por un lado, la formación adecuada, que se dice fácil pero lograrlo es más complicado; por otro, cualidades humanas para ser líder de un grupo. En mi opinión, esto último es más difícil.
P. ¿Se les ha escapado en alguna ocasión un gallo?
R. Sí, claro. Es algo muy normal en cualquier coro. Incluso a mí también se me escapa alguna vez.
P. Como coro universitario, sabrán al dedillo el gaudeamus igitur
R. De memoria, sí. Es un leit-motiv recurrente. Aparece en cada acto oficial porque es el himno oficial de la universidad. Y lo gracioso es que es una canción casi de borrachos, de ronda de estudiantes, donde hay mucha ironía, eso sí, ironía inteligente, que es algo propio de la institución universitaria.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.