Hallado el cadáver de la séptima víctima mortal del temporal de Tenerife

El cadáver de Diego Santana Lorenzo, de 46 años, fue hallado ayer por voluntarios de las Fuerzas Armadas que efectuaban labores de limpieza y desescombro de lodo y rocas, a unos 250 metros de su domicilio, en el barrio de La Alegría (Santa Cruz de Tenerife), uno de los más afectados por el temporal del pasado domingo, que descargó 224 litros por metro cuadrado en dos horas. Con éste son ya siete los fallecidos en esta catástrofe y aún permanece desaparecido otro hombre, vecino del barrio pesquero de San Andrés.

El ministro del Interior, Mariano Rajoy, confirmó ayer en una visita relámpago al centro de coordinación de emergencias de Santa Cruz de Tenerife, previo a su viaje a Lanzarote para inaugurar la Conferencia Europa-Asia sobre gestión de flujos migratorios, que el Consejo de Ministros aprobará una partida de ayudas específicas e inmediatas para los damnificados por la riada de Santa Cruz de Tenerife.

Rajoy anunció para cada afectado hasta 27.500 euros para reponer viviendas y enseres; hasta 9.000 y 3.600 euros para coches y motos, respectivamente; exenciones a impuestos de bienes e inmuebles y actividades económicas; subvenciones a la compra de vehículos nuevos; compensaciones a las siete familias con víctimas mortales y un plan extraordinario para construir viviendas de protección oficial para aquellos que hayan perdido su hogar de forma definitiva. Todas estas ayudas se otorgarán en función de la valoración que haga caso por caso la Comisión Técnica Mixta, donde están representadas todas las administraciones y se otorgarán con independencia de la renta que perciban los afectados. Los daños superan en una primera estimación los 100 millones de euros.

El ministro adelantó que el Estado asumirá el 50% de estas cantidades, mientras el resto será aportado por el Gobierno de Canarias, Cabildo Insular de Tenerife y Ayuntamiento de Santa Cruz. También anunció 'las inversiones necesarias' para recuperar la actividad habitual del puerto, la única infraestructura de competencia estatal. El Gobierno de Canarias decidirá el lunes más ayudas y compensaciones por este suceso.

Tres días después del temporal, un helicóptero de los servicios de emergencias acudió ayer a auxiliar a una vecina de 57 años, de Catalanes, un caserío del Macizo de Anaga, aislada desde el pasado domingo junto a la personas que la cuida. Un facultativo prestó asistencia médica a la señora y se le suministraron víveres y medicamentos suficientes hasta que se repare la única carretera de acceso, que permanece cortada.

La Gerencia Municipal de Urbanismo de Santa Cruz adelantó que el temporal ha dejado 647 viviendas y 423 locales 'dañados seriamente', aunque matiza que esta cifra aún podría incrementarse a medida que se conozca el número exacto de damnificados.

Por otro lado, ayer se procedió a la voladura controlada de la presa de Fumero, un pequeño embalse abandonado que el lunes presentaba grietas, por lo que más de un centenar de vecinos fueron desalojados por temor a que se rompiese.

En Baleares, ayer el temporal de viento, con rachas de más de 139 kilómetros por hora en la montaña de Mallorca, y los continuos aguaceros, de hasta 210 litros de agua por metro cuadrado en Orient (Mallorca) motivaron serios problemas pero no se confirmaron las hipótesis más alarmistas. Los puertos de Ibiza, Palma y Mahón permanecieron cerrados durante horas y las líneas marítimas, así como las aéreas, quedaron afectadas por retrasos y aplazamientos.