El Ejecutivo vasco cree que los textos de ETA prueban su 'descomposición'

El Gobierno vasco y todos los partidos democráticos respondieron ayer con dureza al último comunicado de ETA, en el que la banda se revuelve contra las formaciones independentistas que le exigieron la pasada semana un alto el fuego 'inmediato e indefinido'. El Ejecutivo de Vitoria consideró el texto 'un paso más en la descomposición de ETA', mientras que los partidos abertzales criticados reiteraron su petición de una nueva tregua.

El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, opinó que el texto, además de mostrar 'la propia impotencia de ETA', indica que ésta 'amplía cada vez más el círculo de sus enemigos' al atacar a los sectores de la izquierda abertzale 'que apuestan por la política'. Y ello es 'un paso más en la descomposición' de la banda. Los tres partidos del Ejecutivo autónomo hicieron análisis similares. Mientras el PNV señalaba que los etarras siguen 'fuera de la realidad', EA dijo que las críticas de los terroristas muestran que van 'por el buen camino'. IU cree que la banda 'resucita el síndrome Yoyes', en alusión a la ex dirigente etarra asesinada por sus propios compañeros.

Populares y socialistas vascos coincidieron en que el único comunicado que esperan de ETA es el que anuncie su disolución, idea que también repitió Imaz.

De las cuatro formaciones independentistas criticadas por ETA (Aralar, Batzarre, Zutik y la francesa AB), las tres primeras respondieron ayer a la banda reiterando su petición de que abra un nuevo periodo de tregua.

Patxi Zabaleta, portavoz de Aralar, dijo a este periódico: 'Nos ratificamos en el acuerdo previo al Aberri Eguna [Día de la Patria Vasca] alcanzado con las demás formaciones, incluida EA', que también exigió la tregua, pero no es citada en el texto etarra. Zabaleta subrayó que la solicitud de otro alto el fuego es una demanda 'no sólo de la mayoría de los ciudadanos de Euskal Herria, sino también de una mayoría dentro de la izquierda abertzale', informa Mikel Muez. Zutik dijo en un comunicado que 'ETA se ha convertido en un obstáculo para la liberación nacional y social' del pueblo vasco. La formación parlamentaria navarra Batzarre preguntó a ETA 'si la ruptura de la tregua no degrada la causa de la izquierda y del vasquismo'.

Mientras estas voces se sucedían, el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, insistía en que su formación no pedirá una tregua a la banda porque, además de que ésta no accedería, ello 'no permitirá avanzar' en la autodeterminación.