Berlín envía una delegación de bajo nivel

Pese a ser uno de los principales impulsores de la Convención que habrá de reordenar la Unión Europea, Alemania ha renunciado voluntariamente a enviar a este debate a sus primeros espadas. Por el contrario, con Jürgen Meyer, Peter Glotz y Erwin Teufel ha designado a tres representantes desconocidos incluso para la gran mayoría de los alemanes.

Meyer es un socialdemócrata y reputado catedrático de Derecho que ya ha intervenido en la redacción de la Carta de Derechos Fundamentales y que ha sido escogido para su nueva función por el Parlamento. Glotz, el representante gubernamental, es un experto en medios de comunicación, que entre 1981 y 1987 fue secretario ejecutivo del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) y desde 1996 se encuentra retirado de toda actividad política.

La terna se completa con el delegado de los Estados federados, el primer ministro de Baden-Wurtemberg, el conservador Erwin Teufel, quien hasta ahora no se ha destacado precisamente como experto en cuestiones europeas. Además, desde las filas del Parlamento Europeo, otros tres alemanes participarán en los debates, entre ellos el polémico conservador Elmar Brok.

'Estamos extraordinariamente insatisfechos de que el Gobierno y el SPD hayan decidido la representación según consideraciones partidistas y no de acuerdo a las capacidades de los candidatos', declaró ayer, enojada, Angela Merkel, presidenta de la Unión Cristiana Democrática (CDU). En vez de Meyer, los conservadores hubiesen preferido enviar a Bruselas a Wolfgang Schäuble, ex presidente de la CDU, muy ducho en los debates europeos. Los socialdemócratas, sin embargo, no quisieron dar tanto protagonismo a la oposición.

Altas fuentes del Gobierno, consultadas por este diario, destacan que la selección de los tres representantes podría servir para desatascar otros debates europeos: 'Es bueno que haya un cambio en quienes participan de la discusión: así se aportan nuevas ideas'.