Una UVI para casi 300.000 vecinos

Cuarenta y siete centros de salud, seis centros de especialidades médicas, cuatro hospitales, unos 9.500 trabajadores y casi 110.000 millones de pesetas de presupuesto son los recursos públicos destinados a cuidar de la salud de los 1.200.000 habitantes que viven en el sur de Madrid. Sin embargo, según coinciden en lamentar los municipios sureños, la sanidad pública tiene importantes lagunas en esta zona.

Mientras la Comunidad no construya el hospital comarcal que le reclaman los vecinos, los 65.000 habitantes del área de Aranjuez, por ejemplo, tienen que desplazarse obligatoriamenta a Madrid para resolver sus problemas de salud.

También los 360.000 vecinos del área sanitaria de Leganés y Fuenlabrada, con el hospital Severo Ochoa de referencia, deben acudir a otros hospitales si sufren del corazón, de los ojos o tienen cáncer, porque este centro no dispone de dichos servicios.

En el área sanitaria que incluye Getafe y Parla, el Ayuntamiento de esta segunda ciudad lleva meses movilizando a sus ciudadanos para reclamar también la construcción de un hospital comarcal en su término municipal. El nuevo hospital de Fuenlabrada, ahora en construcción, debería paliar en parte esta situación cuando sea inaugurado, en teoría dentro de dos años.

Las emergencias son el otro foco de las demandas de los municipios. Toda la zona sur de Madrid dispone de sólo cuatro unidades de vigilancia intensiva (UVI) móviles, lo que quiere decir que tocan a una para cada 275.000 habitantes. Las sedes de estas unidades están en Aranjuez (Sercam), Fuenlabrada, Alcorcón y Móstoles (061). El conjunto de la Comunidad de Madrid, con un total de 5.200.000 habitantes, según el último censo, dispone de 52 UVI móviles, es decir, una unidad de este tipo para cada 100.000 personas.