Un paraguas para los mercados españoles
En febrero se constituirá Bolsas y Mercados Españoles, que busca dar respuesta a la competencia mundial entre plazas
Todos los mercados financieros españoles han decidido unirse en una sociedad holding. Bolsas, renta fija, futuros y opciones y liquidación se agruparán, poniendo en claro las participaciones de sus accionistas, los intermediarios, y con el fin de competir ante los procesos de fusiones que se viven en Europa. Esta reestructuración no tendrá efectos positivos claros para el inversor.
El objetivo de menores costes para los inversores tropieza con que el holding cotizará en bolsa y buscará los mayores beneficios
La integración beneficia a los intermediarios que podrán convertir en plusvalías sus ahora dispersas participaciones en los mercados
El mundo financiero español es también un mundo de extremos. Nunca se consiguió poner de acuerdo a las cuatro bolsas (Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia) para su integración. Además, los mercados más novedosos como los de renta fija (bonos, obligaciones) o los de derivados (futuros y opciones) nacieron con una clara vocación de independencia que muchas veces llevaba a sus mandatarios a enfrentamientos pueriles y estériles. Desde esta situación y con los mismos responsables, se ha pasado al extremo contrario: a mediados del próximo mes de febrero se creará la sociedad anónima Bolsas y Mercados Españoles, sociedad holding de mercados y sistemas financieros. Para ello, el Gobierno introdujo a toda prisa, el 31 de diciembre, la legislación que permite este alumbramiento financiero.
La nueva sociedad incluye a las cuatro bolsas, a los mercados de renta fija (AIAF y Senaf) y al mercado de futuros y opciones (Meff holding), a la sociedad encargada de la liquidación Iberclear -formada por el Servicio de Compensación y Liquidación de Valores y la Central de Anotaciones del Mercado de Deuda Pública perteneciente al Banco de España- y, por último, a la Rectora del Mercado de Futuros y Opciones sobre Cítricos.
Así, los mercados financieros españoles quedarán bajo el paraguas de un holding. Esta semana, la Bolsa de Madrid remataba el proceso aprobando su Consejo de Administración los acuerdos que se habían tomado en esta integración que, lógicamente, afecta a los propietarios de los mercados que no son otros que los intermediarios (bancos, cajas de ahorros, sociedades y agencias de valores e, incluso, las propias bolsas).
En el nuevo esquema, será la sociedad holding Bolsas y Mercados Españoles la propietaria de todos los mercados financieros españoles, mientras que los intermediarios serán los dueños de la holding. Según fuentes de la operación habrá unos 140 intermediarios accionistas y cada uno de ellos tendrá un porcentaje en el capital de la sociedad holding de acuerdo con su presencia actual en los distintos mercados. Los bancos, las cajas de ahorro y los grandes intermediarios internacionales serán, lógicamente, los mayores propietarios de esta sociedad, por cuanto son ahora los principales accionistas de los distintos mercados considerados de forma individual.
Para realizar esta operación se hará una valoración de los distintos mercados que ya está encargada a la firma Arthur Andersen y con este dato se fijará una ecuación de canje de cada mercado respecto al holding, con lo que los intermediarios pasarán a ser accionistas, a través de una ampliación de capital. Un proceso que, según fuentes de los mercados, concluirá en torno a junio o julio de este año. El único inconveniente que puede surgir es que la ecuación de canje debe ser nuevamente aprobada por los consejos de los distintos mercados.
Ahorro de costes
El criterio que impulsa a la creación de Bolsas y Mercados Españoles es el de competir en los procesos de alianzas que se viven en todos los mercados mundiales y, muy especialmente, en Europa a raíz de la moneda única. Con una sociedad y un órgano directivo, los mercados españoles podrán dialogar con mayor peso para establecer alianzas o acuerdos con otros mercados europeos o mundiales. También permitirá la realización de estrategias internas con ahorro de costes, permitiendo mayores inversiones.
Sin embargo, el beneficio más evidente lo obtendrán los intermediarios. De tener numerosas participaciones en distintas empresas y con dificultades para deshacerse de ellas si en un momento determinado necesitan liquidez, pasarán a tener su inversión agrupada en una sociedad holding que tiene como uno de sus fines primordiales salir a Bolsa. Después de todo el proceso de constitución, uno de los objetivos básicos es sacar el holding al mercado de acciones, lo que reportará unos grandes beneficios a los intermediarios que, en su día, realizaron una inversión en uno o varios mercados financieros en los que operan.
Salida a Bolsa
La salida prevista a cotizar de Bolsas y Mercados Españoles se situaría entre finales del presente ejercicio y principios del próximo. Fuentes cercanas a la operación consideran que resultaría interesante un periodo de gestión que demostrase las bondades de la sociedad resultante para que los inversores tuvieran más elementos de juicio. Otros mercados como el londinense, el de Francfort o Euronext ya han tenido experiencias de cotización en los mercados de acciones.
Tras esta operación existe, pues, una interesante plusvalía latente para los actuales accionistas. Los beneficios no se ven tan claros para los pequeños inversores que mantienen con las comisiones que abonan el grueso del presupuesto de las plazas. Pese a previsibles ahorros de costes en el holding, fuentes del mercado apuntan que al cotizarse en bolsa esta sociedad se va a regir por criterios de conseguir el máximo beneficio. Con este argumento ve muy difícil que finalmente se produzcan ahorros de costes para los inversores que operan en esas plazas.
Según datos correspondientes al cierre del ejercicio 2000, el holding obtendría unos beneficios de aproximadamente 150 millones de euros (25.000 millones de pesetas). El volumen de negocio en acciones y renta fija rondaría los 2,2 billones de euros (366 billones de pesetas) y unos 22 millones de contratos en futuros y opciones.
Un volumen y unos beneficios que le colocan como un mercado atractivo si se compara con otras plazas europeas. Una dimensión que le permitirá encarar de igual a igual los procesos de fusión que se viven en los mercados internacionales.
Una transición traumática en un ambiente muy sensible
Uno de los aspectos más espinosos es el del nombramiento del nuevo presidente del holding. También habrá que conocer el organigrama de los distintos mercados, habida cuenta de que se creará una superestructura. Los acuerdos alcanzados prevén que se constituya un consejo el 15 de febrero con un mínimo de cinco consejeros y un máximo de 21. En el acuerdo hay 12 consejeros representando a las bolsas, a los grandes intermediarios y a los independientes. En este primer consejo destaca la ausencia del presidente del mercado AIAF, Francisco Oña, aunque será en junio cuando se decida un consejo definitivo.
La Bolsa de Madrid tiene muchas posibilidades de situar a su actual presidente, Antonio Zoido, al frente de Bolsas y Mercados Españoles. Además de la valoración que Arthur Andersen haga de este mercado en relación al resto de plazas, la madrileña tiene participación en el mercado de futuros Meff y en el Servicio de Compensación y Liquidación de Valores (SCLV). Por el otro lado se encuentra el presidente del holding Meff-Aiaf-Senaf que se creó en mayo del pasado año y que muestra a su presidente, José Manuel Basáñez, como candidato a presidir el holding.
Tras estos acuerdos, los mercados se muestran muy sensibles en relación a la configuración final del organigrama del holding. En un principio y para no herir sensibilidades, los mercados continuarán con sus distintos mandatarios al frente. No obstante, cuando el holding se consolide, cada mercado irá perdiendo peso en favor de la nueva sociedad y de su cuadro directivo.
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