Zaplana pretende que la UE cree un Fondo de Cohesión e Innovación

La presentación oficial del programa español de José María Aznar al frente de la Presidencia de la Unión Europea, hoy en el Parlamento comunitario, supone el incio de la cuenta atrás para lograr en estos seis meses que las regiones que previsiblemente dejarán de ser Objetivo 1 en 2006 -como es el caso de la Comunidad Valenciana- puedan ver sustituida la actual financiación adicional que reciben en forma de Fondos Estructurales por una nueva fórmula a medio camino, denominada Fondos de Cohesión e Innovación y que estaría negociado directamente por las regiones y no por los Estados, según fuentes del Consell.

Se trata de un mecanismo por el que la Administración de Zaplana pretende evitar el cierre del grifo de golpe y lograr, al mismo tiempo, un mayor peso regional en la gestión de la I+D+I, ya que estos fondos estarían directamente negociados por los gobiernos autonómicos y destinados exclusivamente a la inversión en innovación y compra de tecnología para modernizar la planta productiva de la Comunidad Valenciana, integrada en un 95% por pymes de entre 5 y 10 empleados y menos de 50, lo que dificulta la adquisición de I+D. La propuesta servirá para medir el grado de autonomismo al que está dispuesto a llegar el Gobierno de Aznar, que -según los expertos consultados a nivel político como científico- 'ha imprimido, más bien al contrario, un giro centralista' a la política científica y tecnológica.

La ministra de Ciencia y Tecnología, Ana Birulés, aprovechó ayer su paso por Valencia para anunciar un ' acuerdo de colaboración para fomentar la investigación y el desarrollo tecnológico' que 'contempla la colaboración a través de programas concretos, como el Ramón y Cajal'. El ministerio presenta como parte del gran acuerdo este programa dirigido desde Madrid para recuperar cerebros, que, en la práctica, es cofinanciado de forma tripartita por las universidades y comunidades autonómas, que consoliden su plantilla. Birulés reiteró que gracias a él la Comunidad ha recibido 374 millones de euros en 2000-2001.

Respecto a la polémica de la investigación con células madre, la ministra pidió un 'debate pausado' a fin de evitar que se entre 'en una situación de riesgos innecesarios'. Birulés defendió la orden ministerial sobre la normativa que han de cumplir las antenas de telefonía móvil, dada a conocer ayer, para que 'pueda ser entendida por los ciudadanos y no sólo por los técnicos' y destacó la necesidad de 'seguir investigando en el ámbito de las tecnologías y los móviles, como en cualquier otra'.