Los empresarios explican a Montoro que la creación de empleo exige un crecimiento superior al 2,5%

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, quiso conocer de primera mano el ambiente que se respira entre las fuerzas vivas de la economía valenciana y aprovechó su visita a Valencia para convocar con urgencia a los presidentes de cámaras, confederaciones y asociaciones empresariales, entidades financieras y ferias. El ministro cantó las bondades de la estabilidad económica aparejada a la introducción del euro y sugirió que la moneda única debe mejorar la financiación de las empresas y garantizar su condición de motor de la generación de empleo.

Pero los empresarios le explicaron que sólo se generará empleo en la Comunidad Valenciana a lo largo de 2002 si la economía crece, como mínimo, un 2,5%, el último índice de crecimiento fijado por el Gobierno central después de dos revisiones a la baja de sus previsiones iniciales.

La Generalitat Valenciana ha estimado una banda de crecimiento entre el 2,5 y el 3%, un escenario que responde a una 'situación ideal', según fuentes presentes en la reunión con el ministro de Hacienda.

Montoro acudió a la Comunidad Valenciana acompañado de los responsables de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para firmar un convenio con la Generalitat que pretende impulsar la inversión de 252 millones de euros (42.000 millones de pesetas) en el desarrollo de 15 millones de metros cuadrados de suelo industrial en la localidad valenciana de Sagunto.

Parc Sagunt acumulará la 'mayor oferta de suelo empresarial de Europa', según sus promotores, y persigue potenciar la actividad en una población que sufrió las consecuencias más bruscas de la reconversión industrial desarrollada hace casi dos décadas.

El proyecto se ha dividido en dos fases y su desarrollo se realizará a través de la Sociedad Parque Empresarial de Sagunto, constituida en octubre del año pasado y participada al 50% por la Generalitat y la SEPI, a través de sus empresas Sepiva e Infoinvest.

Pero al margen de grandes proyectos, Montoro atendió las quejas de los empresarios valencianos relativas a las últimas subidas de impuestos, la falta de definición de las desgravaciones previstas para las empresas que inviertan en I+D+I y algún incumplimiento del programa electoral del PP.

Los representantes de las fuerzas vivas de la economía valenciana recordaron al ministro de Hacienda que el PP se comprometió a suprimir el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) en su último programa electoral y solicitaron al ministro que agilice la cuestión.

Montoro recordó que el IAE nutre las arcas de los ayuntamientos y comentó que el Gobierno 'espera' alcanzar un nuevo acuerdo de financiación municipal a lo largo de este año para que entre en vigor a partir de 2003. Las negociaciones con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) 'están muy avanzadas', comentó el ministro, según fuentes presentes en la reunión.

En una posterior conferencia, Montoro reiteró la misma posición en presencia de Rita Barberá, alcaldesa de Valencia y actual presidenta nacional de FEMP.

Las alusiones del ministro al notable crecimiento económico registrado por la Comnidad Valenciana en los últimos años respecto al conjunto del Estado fueron replicadas con quejas sobre las últimas subidas de impuestos aprobadas por el Gobierno que gravan la gasolina o el tabaco.

El ministro reiteró la versión oficial, según la cual la subida en pesetas constantes no pasa de ser una 'adecuación' en pesetas reales debido a la inflación registrada en los últimos años. Pero su explicación no convenció a los asistentes a la reunión: 'Lo único que esta claro es que ahora pagamos más', replicaron.

También hubo alusiones a la revisión de los módulos que deben pagar las pequeñas empresas y los empresarios autónomos, que constituyen el grueso del tejido productivo valenciano.

Los empresarios también exigieron criterios definidos sobre las desgravaciones a las que podrán acogerse las empresas que destinen recursos a inversiones en I+D+I (Investigación, Desarrollo e Innovación) que, de momento, sólo benefician a los grandes conglomerados. Montoro remitió a las conversaciones entre Hacienda y Ciencia y Tecnología para intentar alcanzar acuerdos al respecto.