Gamesa, Bancaixa y grandes empresarios valencianos quedan fuera del plan eólico de la Generalitat

El anuncio de la preadjudicación de la promoción del Plan Eólico Valenciano deparó ayer varias sorpresas. El grupo que reunía a Gamesa, empresa vinculada a la familia Serratosa y especializada en la construcción de aerogeneradores, y Bancaixa se quedó fuera. También llama la atención que el poderoso grupo de empresarios valencianos reunidos en Energía y Desarrollo Sostenible, que contaba con el apoyo financiero del Banco de Valencia y la aportación tecnológica de Hidrocantábrico, haya sido desplazado.

La Consejería de Innovación anunció una confusa preadjudicación que, de hecho, restringe a cinco los grupos promotores de parques eólicos en la Comunidad Valenciana.

Energías Renovables del Mediterráneo reúne a Iberdrola, a través de la Empresa Hidroeléctrica de Navarra con un grupo de azulejeros de Castellón implicados en negocios de cogeneración. El grupo desarrollará los parques previstos en Els Ports, en la comarca de Los Serranos y en Requena-Utiel.

Eólicas de Levante, una empresa radicada en Elche que tiene vinculaciones con la eléctrica Elecday y Caixa de Catalunya construirá los parques eólicos previstos en Serra Grosa y Benicadell.

Proyectos Eólicos Valencianos, la agrupación de Endesa con la empresa Sedesa, de la familia Cotino, ha resultado adjudicataria de tres de las quince zonas previstas en las sierras orientales de Castellón, Palancia y Ayora.

Nuevas Energías Valencianas reúne a la multinacional alemana Frixia, otra sociedad germana, Industrias Ochoa y el Grup Cooperatiu de Valencia. El grupo ha resultado adjudicatario de parques en Los Serrranos y Ademuz.

Guadalaviar, finalmente, agrupa a Elecnor con el grupo Alabe, que explota varios parques eólicos en Tarifa y Aragón. Guadalaviar debe construir los parques previstos en cinco de las zonas establecidas por el plan eólico, tantas como Energías Renovables del Mediterráneo.

La preadjudicación anunciada ayer responde exclusivamente a cuestiones administrativas y constituye, de hecho, la adjudicación definitiva.

Un total de 17 grupos optaron al concurso convocado por la entonces Consejería de Industria para explotar la energía del viento en la Comunidad Valenciana en 15 zonas.