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Los afectados por inundaciones en Castellón culpan a unas obras públicas

María Fabra

La asociación Inundaciones 2000, formada tras el temporal que afectó gravemente a la Marjalería en Castellón y Benicàssim, señala a tres administraciones -ayuntamientos de Castellón y Benicàssim, y Consejería de Obras Públicas- como responsables de actuar en connivencia y, presumiblemente, a favor de un determinado desarrollo urbanístico. El colectivo entregó ayer a la fiscalía de Castellón la documentación para que estudie una denuncia penal, ya que cree que algunas obras públicas han agravado las inundaciones.

Los vecinos apuntan en su texto la falta de coordinación entre administraciones para subsanar, o al menos minimizar, los problemas que ocasionan las trombas de agua que se han registrado los dos últimos años. Sin embargo, según indican, 'sorprende' la existencia de consonancia e informes favorables respecto a usos del suelo en los respectivos planes generales tanto de Benicàssim como de Castellón, 'con gran previsión de tiempo' en cuestiones 'como las de la urbanización de zonas colindantes y futuras vías de comunicación' entre ambos municipios que afectan directamente a proyectos urbanísticos muy concretos. El texto habla de Benicàssim Golf, un proyecto presentado por Lubasa, del empresario Luis Batalla, para la urbanización de más de dos millones de metros cuadrados de suelo, en el que está previsto un campo de golf, hoteles, zonas comerciales, apartamentos, adosados y viviendas unifamiliares. Posteriormente, Batalla ha dado cabida en la sociedad a Actura, del grupo Bancaixa, y a Rosal, en la que participa la familia Lladró, y a Metrovacesa.

Barranco canalizado

El plan dependía de la aprobación de otro, el del encauzamiento del barranco de La Parreta, que atraviesa la superficie que abarca Benicàssim Golf. El encauzamiento incluía la canalización del barranco de manera que desembocara en el mar. Así, después de casi dos años, la Dirección General de Costas autorizó la canalización y, con ello, la posibilidad de que Obras Públicas iniciara la aprobación para la homologación y la aprobación del plan especial que legalizara Benicàssim Golf. El paso por Obras Públicas era estrictamente necesario debido a la modificación del PGOU de Benicàssim para la recalificación de los terrenos de la urbanización. La aprobación, por parte del consejero José Ramón García Antón, llegó el 31 de octubre.

La documentación presentada a la fiscalía constata que mientras que los informes de la propia empresa certifican que el riesgo de inundación en la zona es de nivel 3, el Plan Territorial para la Prevención de Riesgos de Inundaciones de la Comunidad Valenciana (Patricova) lo sitúa, con nivel 1, como una de las áreas de mayor riesgo. Los vecinos indican que este riesgo no se da sólo en el término de Benicàssim, que se encuentra al norte del barranco de La Ralla, sino también al sur, término de Castellón.

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