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Las instituciones recuperan el plan de revitalización de la Margen Izquierda

El plan, que tendrá vigencia hasta 2005, ha estado parado este año por disputas políticas

Los principales partidos políticos vizcaínos (PNV, PP, PSE y EA) impulsarán a partir de febrero el nuevo plan de revitalización de la Margen Izquierda, que ha estado parado casi un año por las disputas entre las formaciones. En menos de tres meses, se perfilarán las actuaciones e inversiones previstas para cuatro áreas cuyo principal objetivo es reducir el paro de esta comarca hasta los niveles del conjunto del País Vasco, una media que es casi cuatro puntos menor. La inversión global en los cuatro próximos años puede rondar los 250.000 millones de pesetas.

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45.000 millones en la primera fase

El denominado Plan de Revitalización de la Margen Izquierda del Nervión comenzó a aplicarse en febrero de 1997 para hacer frente a la crisis industrial de la comarca, la más afectada en Euskadi por la reconversión de la década de los ochenta. Abarcó a todas las instituciones (los gobiernos central y vasco, la Diputación vizcaína y los once ayuntamientos de la zona), además de PNV, PSE y Partido Popular. No suscribieron el pacto Eusko Alkartasuna, Izquierda Unida y la entonces Herri Batasuna.

Sin embargo, tuvo bastantes problemas durante sus cuatro primeros años de vigencia, que llevaron al PSE a abandonar provisionalmente la comisión debido al lento desarrollo de los proyectos. Estas discrepancias influyeron también en que no se cumplieran los objetivos fijados en un principio.

Concluida su vigencia a finales de 2000, en enero de 2001 se firmó una nueva fase del programa de revitalización con varias novedades. Se incorporó Eusko Alkartasuna y el carácter exclusivamente industrial del plan se amplió a otras materias sensibles para la ciudadanía, como las infraestructuras, el empleo, el bienestar social, el medio ambiente y la vivienda.

La firma del acuerdo, a principios de año, a pocos meses de las elecciones autonómicas, fue además una esperanza en la recomposición de las relaciones entre los partidos, muy deterioradas entonces. Por vez primera en mucho tiempo fue posible la fotografía de nacionalistas, socialistas y populares estrechando sus manos en un acuerdo común. El diputado general vizcaíno, el peneuvista Josu Bergara, suscribió el pacto junto a los máximos responsables en la provincia del PNV, Iñigo Urkullu; el PP, Leopoldo Barreda; el PSE-EE, Patxi López, y EA, Juan Carlos Goienetxea.

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Diez meses sin reunirse

Sin embargo, los buenos propósitos han tardado en concretarse y la comisión de seguimiento del plan ha permanecido diez meses sin reunirse. Hace dos semanas tuvo su primer encuentro, presidido por Bergara y con la participación del consejero de Industria y portavoz del Gobierno, Josu Jon Imaz.

Aunque la idea inicial era que el programa se prolongase de 2001 a 2004, la paralización de este año obligará a que el periodo abarque los ejercicios de 2002 a 2005, aseguraron las fuentes consultadas.

La reunión, además de desatascar el programa, sirvió para la creación de las cuatro comisiones específicas que diseñarán las actuaciones en la Margen Izquierda. Serán las de industria, infraestructuras de transporte y comunicación, empleo y bienestar social y medio ambiente y vivienda. Cada una de ellas estará integrada por ocho miembros, dos en representación de cada una de las cuatro instituciones participantes.

Ahora cada comisión deberá elaborar el documento que especifique las actuaciones necesarias en su área y el compromiso es que los cuatro planes sectoriales se presenten a finales del próximo febrero, según señalaron los participantes en este plan de revitalización. Posteriormente, la comisión de seguimiento analizará conjuntamente los cuatro documentos y aprobará los programas que se deben realizar durante los cuatro próximos años.

Este texto de síntesis definirá la inversión global, que puede rondar los 250.000 millones. Ello se debe a que entre los proyectos previstos se encuentran las plantas energéticas del Puerto de Bilbao, Bahía Electricidad y Bahía Gas, que por sí solos absorben 180.000 millones de pesetas.

Reducir el paro

El acuerdo político suscrito a principios de año preveía también otras actuaciones, como el túnel del Serantes, el nuevo acceso ferroviario de las mercancías al Puerto de Bilbao, cuyo presupuesto ronda los 9.000 millones de pesetas; el parque industrial de Burtzeña en Barakaldo, con un coste de 15.500 millones o el compromiso para aprobar el Plan Territorial Parcial del Bilbao Metropolitano, la magna iniciativa urbanística que prevé habilitar un eje viario sobre el Nervión entre Bilbao y Santurtzi.

Como en el primer programa, el gran objetivo es la equiparación de la tasa del paro de la Margen Izquierda a la media del País Vasco. A principios de año, todavía había una diferencia negativa de 3,6 puntos (11,8% de desempleo frente al 8,2% del conjunto de Eusiadi) en la tasa de paro de la comarca vizcaína. Sin embargo, en 1997 la diferencia era de casi 11 puntos, por lo que esta reducción lograda fue uno de los aspectos más valorados por los firmantes del primer plan de revitalización.

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