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El sector citrícola critica la lentitud de los políticos en la crisis de la clementina

El sector citrícola les ha quitado las medallas que colocaron las Administraciones valenciana y española en el episodio de la crisis de las clementinas con Estados Unidos. Los citricultores defienden su estricto cumplimiento del protocolo de comercio de cítricos con Estados Unidos y piden iniciativas contundentes en defensa de la 'sinrazón' que se ha derivado de una 'campaña organizada' ante la cual opinan que la Administración no está actuando con rapidez.

La interprofesional Intercitrus decidió ayer remitir, tras una reunión que duró cinco horas, una carta a las máximas autoridades valencianas, españolas y europeas en la que expresa su 'descontento por la lentitud de acción' de las distintas administraciones. En la misiva, Intercitrus reclama acciones inmediatas por parte de España y de las autoridades europeas y pide una 'queja diplomática' por lo que califica de 'trato vejatorio y caprichoso' por parte del Gobierno de Estados Unidos. El sector busca soluciones diplomáticas y legales a una crisis iniciada por la 'burda actuación' de EE UU, que 'no se corresponde con la de un gobierno democrático'. En la carta, Intercitrus expresa la 'desazón, desconcierto, indignación y perplejidad' que viven los citricultores 'ante el trato que están recibiendo las clementinas'.

El sector intenta salvar algunos muebles en una campaña que en muchos casos da por perdida. La intervención diplomática y la defensa del acuerdo ante los organismos internacionales se plantean como las pocas vías de solución de un conflicto que amenaza con cerrar definitivamente el hasta hace una semana fructífero comercio citrícola con Estados Unidos. La ayuda económica de la Adminitración también está en su mente. El presidente de Intercitrus, Cirilo Arnandis, explicó ayer que Estados Unidos ha decidido permitir la entrada de las 2.000 toneladas de fruta que permanecen descargadas en puertos norteamericanos. Esta mercancía supone el 10% de la que en estos momentos se dirige hacia Estados Unidos. La interprofesional presentará el lunes un interdicto (procedimiento judicial urgente) ante las autoridades norteamericanas para intentar anular el veto a las clementinas. La prioridad es que las cerca de 22.000 toneladas en ruta y las que ya cuentan con los permisos firmados puedan entrar en el mercado norteamericano. El sector sabe que la prohibición de exportaciones a Estados Unidos y la pérdida de confianza de distribuidores y consumidores generará cuantiosas pérdidas.

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