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El Gobierno central pone a la venta Coosur de forma inesperada y deja al margen al sector olivarero andaluz

Ginés Donaire

El Ministerio de Hacienda, dirigido por el diputado por Jaén Cristóbal Montoro, ha desoído todas las voces que le llegan desde los partidos políticos, sindicatos y organizaciones agrarias para que escuche al sector olivarero andaluz antes de proceder a la privativación de la empresa aceitera Coosur. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del Ministerio de Hacienda, ha puesto a la venta la totalidad de las acciones que el Estado tiene en Coosur (el 86%), a través de la sociedad estatal Alimentos y Aceites, SA (Alycesa).

Y lo ha hecho de forma inesperada, con un anuncio publicado en la prensa de Jaén, donde la empresa asesora Rothschild España comunica que el plazo para participar en el proceso de venta expira el próximo 3 de diciembre.

Aun así, el proceso privatizador de Coosur parecía inminente tras haberse pospuesto en años anteriores por las constantes pérdidas de la empresa, que acumula actualmente un endeudamiento de casi 7.000 millones de pesetas. No obstante, la fórmula de subasta elegida por el Gobierno para materializar la venta de la aceitera, que en su día fue el buque insignia del movimiento cooperativo, ha elevado el temor de que Coosur 'se venda al mejor postor, ignorando al sector olivarero andaluz', según José Pliego, diputado socialista por Jaén.

Pliego ha presentado en el Congreso de los Diputados una Proposición no de Ley donde exige al Gobierno que el actual proceso de venta 'garantice, en cualquier escenario, el mantenimiento de la actividad industrial en la provincia de Jaén y el mantenimiento de todos los puestos de trabajo'.

Desde el PSOE se considera que la vía elegida por el Gobierno para la venta de Coosur es una privatización 'pura y dura' con el único fin de 'hacer caja'. Tras recordar que Andalucía produce más del 80% del aceite de oliva en toda España, José Pliego critica que no se haya contado para nada con el Gobierno andaluz, a pesar de que éste posee un 5,46% del accionariado de Coosur a través del Instituto de Fomento de Andalucía (IFA).

'Esta marginación sectaria no es admisible desde ningún punto de vista y, además, hipoteca el futuro de este sector en el ámbito de la comercialización', subraya el diputado socialista.

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También el senador y coordinador provincial de IU, José Cabrero, ha instado al ministro Montoro a contar con las cooperativas andaluzas y ha animado a la Junta de Andalucía a impulsar un 'proyecto ambicioso' de envasado y comercialización del aceite de oliva andaluz.

Aunque no se descarta que el movimiento cooperativo andaluz puje por la aceitera, habrá que ver cuál es su capacidad de maniobra financiera para competir con firmas interesadas en la compra, como Aceites del Sur, firma sevillana que envasa la marca La Española, Aceites Toledo o el Grupo Migasa, que el pasado mes de abril adquirió a Unilever su filial La Masía.

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