El PSOE propone que 'la desaparición del afecto conyugal' sea causa de divorcio
La iniciativa plantea que la separación deje de ser un requisito para disolver el matrimonio
Si el amor es causa de boda, el desamor puede serlo de divorcio. Este planteamiento inspira la proposición de ley para modificar la normativa sobre rupturas matrimoniales que el PSOE presentó ayer en el Congreso. La iniciativa plantea el divorcio directo (sin separación previa) e incluye entre sus causas la 'desaparición del afecto conyugal'. La mera demanda se considera prueba de ello. 'Queremos evitar la culpabilidad', explica el diputado Javier Barrero. Los malos tratos, motivo inmediato de divorcio, generarán una indemnización del agresor a la víctima.
En su exposición de motivos, el Grupo Socialista argumenta que ha llegado el momento de 'hacer una revisión en profundidad' de la normativa sobre divorcio, aprobada hace 20 años. Mantiene algunos preceptos cuya aplicación ha resultado 'satisfactoria', elimina algunos 'obsoletos' y redacta de nuevo otros que considera anticuados.
- Separación voluntaria. La proposición de ley orgánica sobre modificación del Código Civil en materia de separación y divorcio, que el PSOE presentó ayer por la tarde en el Congreso de los Diputados, mantiene la figura de la separación, pero sólo con carácter voluntario. Ahora es un paso obligatorio para poder pedir la disolución del matrimonio ante la Justicia.
- Mutuo acuerdo, más rápido. En caso de que exista acuerdo para la ruptura matrimonial, se acortan los plazos actuales. Bastará con que hayan transcurridos seis meses de la boda para poder obtener la separación (ahora es un año). Si se opta por acudir directamente al divorcio, se podrá pedir cuando se cumpla un año desde la fecha del enlace (actualmente es al menos un año desde que se pidió la separación). En ambos casos, la demanda deberá adjuntar la propuesta de convenio regulador de la ruptura (reparto de bienes, custodia y pensión de los hijos...).
- Ruptura por desamor. Cuando no exista mutuo acuerdo, hay que alegar motivos para la ruptura. La proposición socialista incluye una causa novedosa para poder pedir la separación o el divorcio: la 'desaparición del afecto conyugal'. 'Es una razón fundamental de las rupturas', afirma el portavoz socialista de Justicia, Javier Barrero. 'Además, permite evitar la culpa', añade. No hay que probarlo: se considera demostración del desamor la mera existencia de la demanda de ruptura ante la Justicia. En las separaciones se podrá aducir ese motivo cuando hayan transcurrido seis meses desde la boda. Sin embargo, para divorciarse por esa causa habrá que dejar pasar dos años desde la celebración del enlace. Este plazo más dilatado obedece al deseo de 'evitar matrimonios fraudulentos ', según Barrero. Por otra parte, motivos como el cese de la convivencia (un año) o la ausencia legal son también motivos de ruptura.
- Malos tratos, divorcio urgente.
La iniciativa socialista no recoge expresamente los malos tratos como causa de separación o divorcio, ya que -según se razona en la exposición de motivos- los considera incluidos en el capítulo de causas derivadas del 'incumplimiento de los deberes legales inherentes al matrimonio o respecto a los hijos que convivan en el hogar' y en los motivos que quiebran la convivencia. 'En caso de que se produzcan agresiones físicas o psicológicas se podrá pedir inmediatamente el divorcio', explica Barrero. El II Plan contra la Violencia Doméstica, aprobado este año por el Gobierno, establecía que las agresiones serían causa de divorcio o separación inmediatos, pero el PP aún no ha planteado esa modificación en el Parlamento.
- Indemnización por agresiones.En su propuesta, el PSOE incluye regular en la vía civil aspectos relacionados con la violencia doméstica (hasta ahora correspondientes a los juzgados penales). El cónyuge que pruebe en el proceso de ruptura haber recibido malos tratos 'tendrá derecho a una indemnización' del otro. Quien ejerza la violencia familiar perderá el derecho a ver a sus hijos. Además, el juez podrá dictar medidas cautelares como prohibir el acercamiento al cónyuge cuando existan motivos fundados para temer que se vaya a producir un ataque a la integridad física del otro o de los hijos. Por idéntico motivo también se podrán suspender las comunicaciones. Dado que estas medidas restringen la libertad, su implantación requiere el rango de ley orgánica.
Reducir las trabas
La legalización del divorcio ha cumplido 20 años. Y los vientos de cambio se han encargado de apagar las velas. El pasado mes de mayo, la Asociación Española de Abogados de Familia rompió la primera lanza al pedir públicamente varias modificaciones, entre ellas el divorcio directo (sin necesidad de separación previa). Con la actual ruptura en dos fases se buscó atenuar las iras de los antidivorcistas ante la aprobación de la ley del Gobierno de UCD, en junio de 1981. El pasado septiembre, Convergencia i Uniò fue la primera en recoger el guante de los letrados. Presentó en el Congreso una proposición de ley para permitir el divorcio directo y la separación voluntaria. Aún sin discutir en la Cámara, ha recibido el apoyo de varios grupos parlamentarios y el silencio del Partido Popular. Ahora, la proposición socialista va más allá al plantear un cambio 'en línea con el que se tramita en Francia', según el diputado Barrero. La reforma gala elimina el divorcio por culpa, vía habitual cuando no existía el mutuo acuerdo.
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