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Homs prevé que Cataluña crecerá menos que España en 2002

La Generalitat cree que el PIB aumentará el 2,6%, frente al 2,9% en España

La economía catalana seguirá desacelerándose el año próximo y crecerá entre el 2,6% y el 2,7%, según anunció ayer el consejero de Economía, Francesc Homs, a sindicatos y patronales al informarles sobre las líneas maestras del presupuesto de la Generalitat para 2002. El crecimiento previsto es inferior al 2,9% que ha calculado el Gobierno central para el conjunto de la economía española. El Gobierno catalán prepara para el año que viene un presupuesto con una inversión mínima de 250.000 millones de pesetas, según Homs.

El producto interior bruto (PIB) catalán ya lleva meses creciendo a un ritmo menor que el español. En el segundo trimestre del año ha aumentado el 2,8%, dos décimas menos que en el trimestre anterior y por debajo del 3% de la economía española, según el Instituto de Estadística de Cataluña. Muchos expertos han constatado que cuando la economía va bien, Cataluña suele ser la primera en despegar, pero que cuando va mal es también la primera en notar la desaceleración. Algo similar le ocurre a la economía europea, que crece el 1,8%, frente al 2,5% el año anterior, según la Comisión Europea.

A juicio de Homs, el menor crecimiento económico permitirá reducir la tasa de inflación en Cataluña hasta alrededor del 2%, frente al 3,4% actual.

La incógnita de la inversión

En relación con las inversiones de la Generalitat, Homs no concretó a la patronal y a los sindicatos si los 250.000 millones de inversión que anunció ayer corresponden sólo al presupuesto de la Generalitat o al consolidado, que incluye todos los organismos dependientes.

Fuentes de Economía afirmaron que los datos ofrecidos por el consejero son aproximados y que las inversiones definitivas se darán a conocer la próxima semana, cuando el proyecto de presupuestos entre en el Parlament.

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Con todo, el volumen inversor inicial avanzado ayer por Homs quedaría por debajo de los 298.803 millones de pesetas previstos para este año para el presupuesto consolidado de la Generalitat.

Homs detalló a los agentes sociales que el año próximo el Estado destinará a inversión en Cataluña 350.000 millones de pesetas. Esta inversión estatal, sumada a los 250.000 millones de la Generalitat, supondrá, según Homs, una inversión total que rondará los 600.000 millones de pesetas, cantidad equivalente al 3% del PIB catalán. La inversión del Estado en Cataluña supondrá el año próximo el 14,5% del total del Estado. Este porcentaje es inferior al peso de la economía catalana en el conjunto español, que ronda el 20%, y también al de la población catalana, el 15,5% del total.

El consejero hizo estas previsiones ante los agentes sociales en el seno del Consejo de Trabajo, un trámite preceptivo antes de presentar los presupuestos al Parlament. Fuentes del Departamento de Economía explicaron que el proyecto de presupuestos puede entrar en la Cámara a finales de la próxima semana.

Homs anunció a los informadores que la prioridad del presupuesto de la Generalitat del próximo año será 'asegurar todo el esfuerzo de inversión para nuevas infraestructuras , así como mejorar la financiación de la sanidad, la enseñanza, el bienestar social y la justicia'.

Asimismo explicó a los agentes sociales que la Generalitat calcula que el año que viene las empresas catalanas necesitarán 48.000 inmigrantes. Esta cifra es superior a los 33.000 inmigrantes que la patronal Fomento del Trabajo ha solicitado al Ministerio de Trabajo para que éste autorice el cupo de extranjeros que entrarán en España el año próximo.

Falta de infraestructuras

El Colegio de Economistas de Cataluña mostró ayer su preocupación por la situación de las infraestructuras en Cataluña. Una encuesta divulgada por la entidad revela que el 43,9% de los colegiados creen que la falta de infraestructuras es uno de los problemas más importantes de la economía catalana. La encuesta se da a conocer una semana después que el Círculo de Economía lanzara críticas al Gobierno central por favorecer a Madrid como polo de desarrollo económico.

El 64% de los miembros del Colegio de Economistas de Cataluña, que preside Jordi Conejos, espera un empeoramiento de la economía catalana en el último trimestre de 2001. El 85% de los encuestados prevén que se produzca un retroceso de la economía tras los atentados perpetrados el 11 de septiembre en Estados Unidos.

Por otra parte, los integrantes del grupo parlamentario en el Senado Entesa Catalana de Progrés, integrado por el PSC, ERC y IC-V, han llevado a cabo una labor casi detectivesca para aclarar el grado de cumplimiento de las inversiones del Estado en Cataluña consignadas en los presupuestos del año pasado. La opacidad, las trabas y los errores interesados a las preguntas formuladas por los senadores intentaban escamotear a los ciudadanos, según afirman, los números reales de las inversiones, informa Gerard Bagué. En el caso de Girona, estos datos resultan reveladores: de los 14.422 millones que el presupuesto del año 2000 destinaba a obras en la provincia de Girona, sólo acabaron siendo realidad 6.659 millones. El cumplimiento real está por debajo del 50%, explicó el senador Isidre Molas.

De las 26 obras programadas para el año 2000 en Girona, 11 no recibieron ni una peseta. Entre las obras presupuestadas que no han sido llevadas a cabo durante el año pasado, se encuentran diversos caminos de ronda de la Costa Brava. El presupuesto del Estado preveía 70 millones para el itinerario Aiguablava-Aigua Xellida, 75 para el de Punta Cloata-Punta Montgó, 60 para la ronda Illa Roja-Sa Riera, 150 para Platja d'Aro-Calonge y 75 para Platja del Racó-Illa Roja. Ni uno de ellos se ha empezado. Las obras de la Dirección General de Costas son las que se llevan la palma del incumplimiento. De los 3.430 millones previstos en el presupuesto, sólo se han realizado obras por valor de 730 millones.

Por su parte, sindicatos y patronales plantearon ayer diversas propuestas al consejero Homs. La patronal Fomento del Trabajo pidió una reducción de la presión fiscal actuando sobre los impuestos que ha cedido el Estado a la Generalitat. Homs, como ya hizo en julio al presentar el acuerdo de financiación autonómica, rechazó reducir los impuestos. En cambio, señaló que habrá más recursos para apoyar la exportación de las empresas. La patronal Pimec-Sefes destacó como prioritarios los aspectos que afectan a la competitividad de las empresas.

El sindicato UGT presentó a Homs un plan de inversiones que prevé un gasto de 501 millones de euros (unos 83.000 millones de pesetas), de los que la mitad se destinarían a la mejora de la sanidad. CC OO afirmó que los 86.000 millones de pesetas que llegarán a Cataluña en el año 2002 por el nuevo modelo de financiación deberían destinarse a doblar la renta mínima de inserción e incrementar las ofertas de guarderías, el gasto sanitario y los servicios a las personas dependientes.

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