Leyes europeas más duras contra el enemigo común

Los sucesos del 11 de septiembre han acelerado la capacidad de maniobra de los gobiernos para poner cerco al terrorismo nacional e internacional. La premura con la que se han aprobado estas leyes ha endurecido su cariz. Éstos son los principales países que han legislado sobre el terrorismo desde los atentados de Nueva York y Washington:

- Reino Unido. El Gobierno de Tony Blair ha respondido al terrorismo en Estados Unidos con un retorno a algunos vicios pasados. Se restituye la posibilidad de internar a sospechosos de manera indefinida y sin respaldo judicial. Otras medidas menos polémicas consisten en impedir que residentes en Reino Unido puedan contactar con grupos terroristas en el exterior, obligar a las compañías aéreas a que informen sobre sus pasajeros y permitir a la policía que congele cuentas sospechosas.

- Francia. El endurecimiento de medidas legales en Francia está en principio limitado hasta diciembre de 2003. El Ejecutivo de Lionel Jospin permite desde ahora realizar registros de vehículos sin permiso judicial y cacheos en lugares públicos. Otra gran novedad de esta nueva legislación obliga a los proveedores de Internet y a las empresas de telecomunicaciones en general a conservar durante un año las huellas de uso de sus clientes.

- Alemania. El tabaco y las bebidas alcohólicas se encarecerán en este país para poder financiar la lucha antiterrorista. Ésta ha sido la última medida acordada por el Ejecutivo alemán, que ya había aprobado otras, como restringir la libertad de asociación religiosa para grupos islamistas. Además, el Gobierno ultima un nuevo paquete de medidas para la seguridad interna.

- Italia. La legislación italiana contará con un nuevo delito de terrorismo internacional. A los acusados de este delito se les podrán aplicar las mismas leyes que rigen para la Mafia, principal enemigo de la sociedad italiana.

- España. Los escasos días transcurridos desde el 11 de septiembre han sido más eficaces en la legislación antiterrorista que los últimos 10 años. España ha firmado una serie de pactos con Francia impensables hace un año. Las nuevas medidas permiten que terroristas encarcelados en Francia puedan trasladarse temporalmente a España para ser procesados. Además, los detenidos serán juzgados en el país donde hayan cometido el mayor delito. Equipos de investigación hispano-franceses investigarán conjuntamente. Además, la documentación incautada se entregará inmediatamente en copias.