Firmeza del dólar y apoyo al yen
Los mercados de divisas estuvieron mucho más tranquilos que las bolsas. Los movimientos fueron centesimales a lo largo de toda la jornada con un dólar firme que se depreció ligeramente respecto al euro pero que subió frente al yen japonés.
El Banco Central Europeo fijó el cambio ofical del euro en 0,9164 dólares, una ligerísima apreciación frente al cierre del pasado viernes. A lo largo de la jornada el euro volvía a sus niveles de apertura con una suave subida del dólar. Los expertos apuntan que en las circunstancias actuales existe una necesidad de que el dólar mantenga su firmeza. La razón se encuentra en que esta economía necesita captar capitales y una depreciación del dólar acarrearía la salida de muchos inversores extranjeros que en los últimos dos años han conseguido importantes ganancias por el simple hecho de adquirir dólares.
La coordinación entre los bancos centrales es cada vez más fuerte. Ayer el BCE junto con el banco central de Jápón decidían adquirir euros para debilitar al yen frente a la moneda europea y frente al dólar. Sin embargo, no se especificó la cuantía
El problema japonés es distinto ya que su exceso de ahorro no les obliga a captar capitales y, por contra, un yen débil favorece las exportaciones y la reactivación de la economía.
Esta acción conjunta que permitió la depreciación del yen, ya se ha repetido en otras situaciones. Los bancos centrales europeos y de Japón ya cooperaron interviniendo juntos en los mercados en septiembre de 2000, cuando el euro se hallaba en los niveles más bajos frente al dólar desde su creación de esta moneda en enero de 1999.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.