Las extractoras de orujo demandan al Estado por la inmovilización del aceite

Las extractoras de orujo están en condiciones de volver a vender aceite, pero se han quedado sin mercado. El vicepresidente de la Asociación Nacional de Aceite de Orujo (ANEO), Manuel Hurtado, informó ayer que su organización reclama al Estado por los daños causados al inmovilizar 40.000 toneladas de aceite crudo, que valoran en 5.000 millones de pesetas. El consejero de Agricultura, Paulino Plata anunció un decreto por el que el sector podría recibir 7.500 millones de ayudas públicas, en los próximos cinco años.

Representantes de las 44 extractoras de orujo andaluzas se reunieron ayer en Málaga con el consejero de Agricultura de la Junta para analizar la crisis del sector, que se ha quedado sin mercado después de que el 3 de julio se inmovilizaran 40.000 toneladas de aceite en crudo 'al que no tenía acceso el consumidor, porque no estaba refinado, por lo que no había peligro alguno', afirmó ayer Manuel Hurtado, de Artarfe (Granada), vicepresidente de ANEO.

Hurtado considera la alarma sanitaria 'desproporcionada e infundada' e informó que sus asociados, de manera colectiva e individual, han presentado reclamaciones patrimoniales al Estado por daños y perjuicios, mediante un trámite administrativo y que si no son atendidas acudirán a los tribunales por la vía contenciosa. Los orujeros valoran en unos 5.000 millones el valor del aceite que no les dejaron comercializar, que es la cuantía de un préstamo que se está negociando ahora con el Ministerio 'a un interés nulo o mínimo' precisó Paulino Plata.

La Consejería prepara para octubre un decreto por el que se canalizarán fondos europeos, del Feoga Orientación, para la modernización de este sector 'que podrían suponer en el período 2000-2006 un máximo de 7.500 millones de pesetas de ayudas públicas'. Plata precisó que esta campaña los residuos de la aceituna serán casi 4 millones de toneladas y que 'las extractoras de orujo tienen una labor medioambiental insustituible para su eliminación'.

La administración busca salidas para las más de cien mil toneladas de orujo que habrá almacenadas al final de esta campaña. Cualquier uso que no sea el consumo humano, como la alimentación animal o la energía, rebaja considerablemente el precio de 125 pesetas por kilo del aceite crudo de orujo. El consejero valoró en 2.700 millones el dinero necesario para compensar los usos alternativos.

Las 60 extractoras españolas estaban vendiendo unas 5.500 toneladas al mes antes que el Ministerio de Consumo decretara una alerta alimentaria por el alto contenido de alfabenzopireno en el aceite de orujo de oliva. El Ministerio de Agricultura estableció en dos partes por cada mil millones el contenido máximo permitido de esta sustancia.