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Granada Acoge denuncia que ciertos bares impiden la entrada a magrebíes en Zafarraya y el alcalde lo niega

La asociación Granada Acoge anunció ayer que va a enviar al Defensor del Pueblo Andaluz un escrito firmado por una cincuentena de inmigrantes, empleados en trabajos agrícolas de temporada en Zafarraya (Granada), en el que aseguran que la mayoría de las tabernas y bares de copas les niegan la entrada 'por la única razón de ser marroquíes'. El alcalde socialista de Zafarraya, Salvador Zamora, dijo que es 'incierto' que se hayan dado casos de discriminación por razón de raza. 'Sí ha habido actos concretos en que los dueños de los establecimientos han negado la entrada a personas que iban borrachos y que con anterioridad han montado broncas y molestado a los clientes'.

Jesús Puga, presidente de Granada Acoge, explicó que esta actitud racista se ha extendido a 'casi todos los bares' y que la Guardia Civil y el Ayuntamiento, aunque han sido informados por los propios inmigrantes, no han intervenido para zanjar la supuesta ofensa. 'Ante la situación de indefensión en la que se encuentran han decidido hacer un escrito y recoger firmas, adjuntado en muchos casos su documentación, como la única manera digna y civilizada de responder antes estos sucesos. Estas firmas se van a remitir al Defensor del Pueblo para que medie y ponga fin a estos hechos repudiables'.

Zafarraya es una población de 2.300 habitantes que durante la temporada alta, desde hace ya una década, acoge a un número creciente de inmigrantes. Este año, entre mayo y junio, acudieron unos 1.500 temporeros magrebíes. Nunca, salvo unas disputas acaecidas a comienzos de este verano, se han registrado incidentes de tinte racista, según el alcalde de la población.

'Entre los vecinos de Zafarraya hay inmigrantes plenamente asentados desde hace diez años. Uno o varios casos concretos de personas ebrias a quienes se les ha negado la entrada a un bar no sustenta una acusación generalizada de racismo. Es mád, si la ha habido, los inmigrantes deben denunciarlo ante la Guardia Civil', añadió Salvador Zamora.

Para el presidente de Granada Acoge los incidentes no se circunscriben a un caso determinado y está convencido de que existe 'connivencia' entre los propietarios de los bares y las autoridades que 'conociendo estos hechos no hacen nada para evitar que estas personas se vean humilladas y lesionadas en sus derechos'.

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