La CNMV y Gescartera
En relación con la información publicada el día 13 de septiembre por el diario que usted dirige, con el título La CNMV desechó en 1999 la intervención de Gescartera tras haberla preparado con detalle, me siento en la obligación de realizar algunas precisiones de fondo que afectan al contenido de la citada información.
En ella se señala textualmente que, según fuentes cercanas a la Comisión, la contundencia del informe de Vives y las irregularidades que describía 'hicieron que se pusieran en marcha los mecanismos necesarios para poder llevar adelante la intervención en cuanto la aprobase el Consejo. Pero el Consejo no la aprobó'.
En referencia a este extremo concreto, tengo que manifestarles que en el Consejo de la CNMV del 16 de abril de 1999, presidido por Juan Fernández Armesto, el director general de Supervisión de la CNMV, don David Vives, no hizo ninguna propuesta en la que se solicitase la intervención de Gescartera Dinero, como consta en el orden del día del citado Consejo y en su correspondiente acta. En la citada acta se da fe de que en el orden del día de dicha sesión la Dirección General de Supervisión no presentó propuesta alguna de intervención, con lo que difícilmente el Consejo podía aprobar algo que no estaba en el mencionado orden del día y más difícil resulta aún que previamente a dicha reunión 'se pusieran en marcha los mecanismos necesarios para poder llevar adelante la intervención en cuanto la aprobase el Consejo', como se afirma textualmente en la información.
En el citado Consejo, el señor Vives informó verbalmente de algunas de las actuaciones de la CNMV relacionadas con Gescartera, tras lo que el Consejo decidió, por unanimidad de todos sus miembros, incluida Pilar Valiente, reforzar dichas actuaciones supervisoras sobre la citada entidad.
Por otra parte, y en otra información de su diario referida también a Gescartera, se afirma que la presidenta de Gescartera, Pilar Giménez-Reyna, 'hizo varios regalos' a Pilar Valiente, y se añade que 'uno de esos presentes fue, según el abogado de Camacho, un maletín de Loewe cuyo coste era de 300.000 pesetas'. En relación con esta afirmación, la presidenta de la CNMV, Pilar Valiente, ya ha manifestado públicamente que sólo aceptó un regalo a título personal de Pilar Giménez-Reyna y que rechazó otro regalo enviado por el señor Camacho consistente en un portafolio de piel de la marca que ustedes citan.
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