Industria cree necesarios sólo cinco de los 13 parques eólicos previstos

El Departamento de Industria, Comercio y Turismo del Gobierno vasco aprobó inicialmente el pasado 11 de julio el Plan Territorial Sectorial (PTS) de Energía Eólica, aunque su titular, Josu Jon Imaz, no lo presentó oficialmente ante los medios de comunicación hasta ayer. Este plan, en cumplimiento de una resolución del Parlamento autónomo de 1997, regulará el establecimiento de parques eólicos en la comunidad autónoma, donde ya está en funcionamiento el de Sierra Elgea, en el límite de Álava con Guipúzcoa.

Atendiendo aspectos ambientales, energéticos, técnicos y económicos, el documento contempla 13 emplazamientos ados como apropiados para ubicar parques eólicos. Los espacios seleccionados en Vizcaya son Oiz, Ganekogorta y Ordunte. Las zonas guipuzcoanas donde podrían instalarse los parques son Irukurutzeta, entre Azkoitia y Málzaga; Zamiño-Izaspi, entre Zumárraga y Azkoitia, y Gazume, anexa a la sierra de Ernio, así como Mandoegi y el ya instalado de Elgea-Urkilla. En Álava podrían instalarse además estaciones eólicas en Kolometa, Arkamo, Badaya, Montes de Iturrieta y Cruz de Alda-Arlaba.

Ahora bien, el PTS de Energía Eólica selecciona como lugares 'preferentemente apropiados' los de Ordunte, Ganekogorta, Oiz, Mandoegi, Elgea-Urkilla y Badaya, salvaguardando en principio los otros siete. La instalación de un parque en uno de estos últimos emplazamientos sólo se estudiaría en el caso de que se acreditara la existencia de dificultades para alcanzar los objetivos previstos en el Plan Estrategia Energética de Euskadi 2005, que contempla 175 megavatios de potencia instalada, según recordó Imaz.

En este sentido, el consejero destacó que, dados los avances de nuevas tecnologías, 'cada vez un mismo molino es capaz de generar más energía eléctrica'. Por ello, consideró que, 'posiblemente', con cinco parques -cuatro más añadidos al de Elguea- se podrían lograr los objetivos de energía eólica fijados para el año 2005.

El plan aprobado señala que los promotores interesados en instalar un parque eólico tendrán que presentar previamente un estudio de impacto ambiental. Además, insta a las administraciones públicas competentes a fomentar el desarrollo de nuevas tecnologías encaminadas al aprovechamiento eólico con menores intensidades de viento que las actualmente necesarias, con el fin de permitir el desarrollo de parques fuera de las zonas de montaña, donde el impacto visual es mayor, y salvaguardar así a largo plazo el patrimonio natural y paisajístico.

Las administraciones públicas vascas tienen hasta el próximo 29 de agosto para presentar alegaciones a la aprobación inicial del PTS de Energía Eólica, mientras que las asociaciones y particulares cuentan de plazo hasta finales de septiembre.

Antes de esta aprobación inicial se elaboró un avance que fue remitido a las administraciones públicas para que formularan sus observaciones. El impacto visual de los parques eólicos fue una de las quejas más numerosas en las 39 alegaciones presentadas, 25 por parte de las instancias públicas y 14 por parte de grupos políticos, ecologistas y particulares. También se elegaron efectos sobre la avifauna y la emisión de ruidos.