El Defensor del Pueblo investiga la muerte de un joven en la comisaría de Rota y la paliza a un inmigrante

El defensor del pueblo, Enrique Múgica, ha abierto dos quejas de oficio para aclarar la actuación de agentes de policía en dos sucesos ocurridos en Rota (Cádiz) y en Badalona (Barcelona). En el primer caso, la investigación se refiere a la muerte de E.D.G., de 18 años, en una comisaría de la Policía Nacional en Rota, y en el segundo a la paliza que, supuestamente, tres policías dieron al ciudadano marroquí Addelhak A., de 27 años, en Badalona.

El Defensor ha dirigido un escrito al director general de la Policía en el que le pregunta por el caso de E.D.G., quien el pasado jueves, tras acudir a la comisaria de Rota al saber que se le buscaba por un robo, fue detenido y encerrado en los calabozos, según recoge una nota de la Subdelegación de Gobierno. Cuando los funcionarios fueron a tomarle declaración lo encontraron muerto, por lo que se avisó a los servicios médicos y al juzgado de guardia, que autorizó el levantamiento del cadáver y su traslado para que se le practicase la autopsia, de la que aún no se han facilitado los resultados. El Defensor ha pedido al director general de Policía que le sea remitido el informe interno que se está elaborando y que le dé cuenta de las circunstancias en que se produjo el fallecimiento.

En lo que se refiere a lo sucedido en Badalona, el Defensor también ha dirigido un escrito al director general de la Policía para que confirme o desmienta si los hechos relacionados son ciertos y le ha pedido que le remita asimismo el resultado del informe interno que se está elaborando. Según Addelhak A., en la madrugada del pasado lunes se dirigió al policía uniformado que custodia la entrada de la Subdelegación del Gobierno en Barcelona para denunciar la pérdida de un pasaporte. Al parecer, el agente le respondió con malos modos. En ese instante, explica el denunciante, una persona que portaba una pistola y un receptor de radio le invitó a subir a un coche acompañado por otros dos supuestos agentes.

El marroquí relata que le dijeron que 'sólo querían hablar' con él y que una vez en el coche le insultaron y le amenazaron de muerte. El vehículo circuló durante un cuarto de hora por una autopista y cuando el coche se detuvo, dos de los policías comenzaron a golpearle en las piernas mientras el tercero miraba. El marroquí pudo huir, pero dos de los agresores le alcanzaron y volvieron a golpear en las piernas y le abandonaron después.

La Jefatura Superior de Policía de Barcelona ha abierto una investigación tras la denuncia presentada por la víctima y su portavoz anunció ayer que 'no se tomará ninguna medida disciplinaria hasta que ésta finalice'.