20 artistas se sitúan en "los márgenes del arte" a través de la electrónica

Arte & Electricidad surgió en mayo del año pasado como un lugar de encuentro entre jóvenes creadores del arte audiovisual y tecnológico. El proyecto, un año después, ha desembocado en un compendio de obras en formato diverso en el que han intervenido músicos, diseñadores, artistas plásticos y creadores vinculados al vídeo o a Internet.

La experiencia compartida por los 20 autores ha permitido explorar 'nuevas fórmulas de completar el proceso creativo', explicó ayer Nacho Rodríguez, miembro de la Fundación Rodríguez. Ha sido un 'trabajo remoto', esto es, una labor en red entre los artistas, cada cual desde su herramienta electrónica y en conexión con el resto que ha dado como fruto creaciones musicales, de diseño, arte gráfico, video y otras soluciones relacionadas con la multimedia.

Estas propuestas de arte vanguardista se introducen, abundó Nacho Rodríguez, en 'territorios que circundan la esfera de la creación'. Salen fuera del 'circulo cerrado del ensimismamiento del arte convencional' y se instalan en sus 'aledaños'. Esta suerte de encuentros artísticos impulsados por Arteleku son una forma de 'reflexionar sobre el nuevo panorama de creación contemporáneo', subrayó.

Distribución Arte & Electricidad huye de los modelos establecidos de creación y de distribución artísticas. Este proyecto opta por 'incidir en nuevas fórmulas de presentación y de darse a conocer de los trabajos de los artistas', afirmó Fito Rodríguez. Por ello, la fundación que ha coordinado este taller decidió 'canales de distribución distintos' al uso actual. Las obras de los autores se han reunido en un video de 50 minutos, se muestran en la dirección digital www.arte&electricidad.net y también en dos discos compactos que se distribuyen con el número de julio y agosto de la revista Neo2, que vende 30.000 ejemplares en España y otros 5.000 en el extranjero.

Además, sus promotores utilizarán otros canales de exhibición, como revistas de música, proyecciones de video en galerías, festivales electrónicos o en eventos como la feria Arco de Madrid. Con estas fórmulas de 'distribución multiforme', afirmaron los miembros de la Fundación Rodríguez, pretenden asimismo facilitar el acceso del espectador a las nuevas creaciones y poner en cuestión 'el valor real de las obras de arte'.