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El derribo de dos edificios de una escuela dará mayor perspectiva al Palau de la Música

El auditorio modernista pacta comprar parte de un colegio religioso para crear una plaza

El monto de la operación ronda los 500 millones de pesetas y debe obtener el permiso previo del Ayuntamiento de Barcelona, que tiene que recalificar los solares ahora calificados como equipamiento educativo. Según los responsables del Palau de la Música, el consistorio ve con buenos ojos la operación si hay acuerdo entre las dos partes, ya que el derribo de las dos casas que albergan aulas, adyacentes al edificio original de colegio, del arquitecto Bonaventura Bassegoda Amigó, y la creación de una plaza permitirían el esponjamiento de esta zona del barrio de la Ribera.

Los edificios son los números 13 bis y 15 de la calle de Sant Pere més Alt, el primero de los cuales hace esquina con la calle de Amadeu Vives y es colindante de la iglesia del colegio. La compra y el derribo de estos dos edificios permitirá abrir una plaza con una superficie de 250 metros cuadrados frente al ángulo en el que se encuentran las dos fachadas, en el que sobresale el conjunto escultórico de Miquel Blay alegórico de la canción, que actualmente tiene una escasísima perspectiva.

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Los dos edificios que el Palau de la Música tiene la intención de comprar y derribar albergan aulas del colindante colegio La Salle Condal, un edificio original de estilo historicista que, según reza una placa en la entrada principal de la escuela, obtuvo el premio del gremio de arquitectos en 1907.

El acuerdo de intenciones firmado entre los responsables del auditorio modernista y los Hermanos de la Salle, propietarios del colegio, que imparte educación infantil, primaria y secundaria, prevé la adquisición por parte del Palau de los dos edificios y la construcción de aulas en el recinto de la actual iglesia a cargo del comprador, como compensación por la pérdida de espacio por la venta de los dos edificios.

Los responsables del Palau de la Música, edificio de propiedad privada del Orfeó Català pero administrado por un consorcio de tres instituciones públicas -Generalitat, Ayuntamiento de Barcelona y Diputación-, estiman que el coste de la operación alcanzará los 500 millones de pesetas. Ahora se estudia la fórmula más rápida en el aspecto administrativo para adquirir los edificios, cuyo pago está previsto realizar a través de la Fundación del Palau de la Música con el dinero de los mecenas del auditorio modernista.

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Los responsables de la sala de conciertos estudian la posibilidad de proponer a las administraciones que la compra se realice a través del consorcio público que rige el Palau, aunque el dinero lo proporcione la fundación privada. Que al final acaben siendo las instituciones las que realicen la adquisición y figuren como titulares del solar de 250 metros cuadrados que se pretende convertir en una plaza no preocupa a los directivos de la fundación que financiará la operación, ya que las administraciones prolongaron en diciembre del año pasado su compromiso de tutelaje del Palau de la Música a través del consorcio hasta el año 2053.

Trámites administrativos La posibilidad de que sean las instituciones públicas que integran el consorcio las compradoras de los dos edificios permitiría agilizar y reducir considerablemente el plazo para realizar los trámites administrativos de recalificación de los solares, frente a un comprador privado como es la fundación del Palau. En cualquier caso, el plazo mínimo para realizar todos los trámites no es inferior a un año y medio, según indicaron a este diario fuentes del auditorio modernista, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.

Los planes de los responsables del Palau de la Música son poder inaugurar la plaza en 2003, año en el que está previsto que finalicen las actuales obras de ampliación del edificio con la construcción de un auditorio subterráneo con capacidad para 600 personas, que se realiza en el espacio que ocupaba la antigua nave de la iglesia colindante, y de un nuevo edificio donde antes se alzaban el atrio y el pórtico del desaparecido templo, que albergará un restaurante y zonas de servicios.

Conjunto escultórico de Miquel Blay en el Palau.
Conjunto escultórico de Miquel Blay en el Palau.MARCEL.LI SÁENZ

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