El edil de Educación de Torrelodones vetó indagaciones sobre la guardería en la que se vejó a los niños

Padres de niños que sufrieron malos tratos entre 1996 y 1997 en la guardería municipal de Torrelodones han denunciado que el concejal de Educación, Javier Navarrete (PP), prohibió en su día al director de los servicios sociales investigar la situación de la escuela infantil municipal bajo la amenaza de sancionarle.

Los casos de malos tratos registrados en la guardería durante el curso 1996-1997 han provocado la condena judicial y consiguiente expulsión del centro de una de las educadoras de la guardería. Esta empleada, que dirigía la escuela infantil cuando se produjeron los hechos, ha conservado un puesto de trabajo en el centro hasta que, la semana pasada, el Juzgado de Instrucción número 2 de Collado Villalba la condenó, junto a otras dos empleadas, a 72 fines de semana de arresto domiciliario. La juez ha estimado probado que las condenadas golpeaban, insultaban y vejaban a los niños, haciéndoles ingerir sus propios vómitos y duchándolos con agua fría ante las ventanas abiertas en invierno.

Ahora, los padres de los pequeños han desvelado una carta que Navarrete envió al responsable de servicios sociales en la que, tras acusarle de realizar 'indagaciones sospechosas de mala interpretación a las personas que integran la Escuela Infantil Municipal', le prohibía continuar la investigación y solicitaba un informe por escrito del contenido de las entrevistas. Navarrete amenazó también al jefe del departamento con emitir un 'apercibimiento laboral' si desobedecía la orden y continuaba las reuniones con personal de la guardería con el objeto de aclarar los rumores que corrían sobre los malos tratos.

En el mismo sentido, los representantes de los trabajadores del Organismo Autónomo de Cultura de Torrelodones han emitido un comunicado en el que afirman que Navarrete 'amenazó, despidió y trasladó de puesto de trabajo' a las empleadas de la guardería que denunciaron los hechos. También afirman que las trabajadoras de la escuela denunciaron lo sucedido directamente al concejal de Educación, y que éste hizo caso omiso de la misma y tomó represalias contra las denunciantes.