Pilar del Castillo entrega los premios nacionales de literatura
La ministra de Educación, Cultura y Deporte, Pilar del Castillo, entregó ayer en Zaragoza los premios nacionales de Literatura del año 2000, con los que destacó que se pretende devolver a los galardonados una parte de lo que han regalado a la sociedad fruto de su talento y su trabajo en un acto en la Lonja de la ciudad.
El filólogo, crítico e historiador de la literatura Martín de Riquer, Premio Nacional de las Letras Españolas 2000, fue distinguido por 'la amplitud y la calidad de su obra escrita en catalán y en castellano sobre literatura románica medieval'. En Narrativa, el galardonado fue el leonés Luis Mateo Díez, por su obra La ruina del cielo, también Premio de la Crítica, mientras que el escritor valenciano Guillermo Carnero recibió el Premio Nacional de Poesía, por la obra Verano inglés.
El castellano-manchego Domingo Miras recogió el premio de Literatura Dramática, por sus obras Una familia normal y Gente que prospera, en tanto que Javier Echeverría recibió el Premio Nacional de Ensayo por su obra Los señores del aire: Telépolis y el tercer entorno. En el apartado de Historia de España, fue distinguida la obra colectiva Símbolos de España, de Faustino Menéndez Pidal, Hugo O'Donnell, Begoña Lolo y Carmen Iglesias. Emilio Pascual, en Literatura Infantil y Juvenil, por la obra Días de Reyes Magos; José Luis Reina por la traducción del alemán de las Obras completas, de Paul Celan, y José Luis López Muñoz, por el conjunto de la obra de un traductor fueron otros de los galardonados. La Editorial Biblioteca Nueva fue distinguida por la Mejor Labor Editorial Cultural y Fernando Sánchez Dragó recibió el Premio Nacional al Fomento de la Lectura a través de los Medios de Comunicación.
