Cinco grandes pintores del siglo XX muestran su fascinación por el desnudo
Se exhiben en Bilbao obras de Picasso, Bacon, De Kooning, Dubuffet y Saura
'La obra de estos cinco artistas resume la intensidad y el carácter de la revitalización del desnudo', explicó Concepción Badiola, de la Fundación BBVA, patrocinadora del evento, en la presentación, el lunes, de la muestra. El comisario de la exposición, Francisco Calvo Serraller, destacó la enorme importancia de Pintura al desnudo: 'Conseguir los préstamos de algunas de estas obras es una hazaña que acredita la solvencia del Museo de Bellas Artes de Bilbao. Hay cuadros que vienen a España por primera vez; más de la mitad de los que aquí cuelgan'. Las piezas proceden de diversos museos y colecciones internacionales, como el Metropolitan de Nueva York, Amsterdam, el Stedelijk Museum, París o de la National Gallery de Australia.
Las obras, todas realizadas entre los años cincuenta y sesenta, intentan contextualizar el tríptico Las tres Gracias, de Antonio Saura (1930-1998), incoporado a la colección del museo el pasado mes de marzo por una dación del BBVA. Los autores elegidos prestan atención a la desnudez desde la abstracción y la figuración, y pertenecen a diferentes tendencias, como el expresionismo norteamericano o el informalismo europeo. 'Nunca antes de nuestra época hubo un auténtico franqueamiento de lo obsceno, una verdadera profanación artística del desnudo clásico', explicó Calvo Serraller.
'El desnudo es una forma de arte, es el desnudar la pintura, llegar a ella de la manera más radical y extrema', defendió el comisario de la muestra, que indicó además que los cinco artistas se dedicaron 'con especial intensidad', durante los años cincuenta y sesenta, 'al tema del desnudo en un límite entre la abstracción y la figuración, presidido por la libertad técnica y la exaltación de la pintura sobre la forma'.
El comisario comentó que la idea de la exposición conjunta de estos cinco exponentes de 'la última gran vanguardia del mundo occidental', como él mismo calificó a los artistas reunidos, procede de un deseo frecuentemente expresado por Antonio Saura. 'El propio Saura se veía en compañía de estos pintores desarrollando un proyecto artístico excepcional', dijo. Sus palabras fueron apoyadas por la hija del pintor, la actriz Marina Saura, que también asistió en Bilbao a la presentación de la muestra junto a la viuda del artista, Mercedes Beldarrain. 'El proyecto era ambicioso; tenía una razón de ser fundamental y era que mi padre había hablado y dejado por escrito su relación con los pintores aquí representados. Siempre comentaba cómo le fascinaban los desnudos de De Kooning, los de Dubuffet...', explicó Marina Saura.
Pintura al desnudo, un título que juega con el tema de las obras y con la fuerza pictórica de las mismas, arranca con el óleo sobre lienzo Mujeres arreglándose, de Picasso (1956), con la presencia rotunda de dos figuras femeninas. Dama de color vino, de Dubuffet (1950); Mujer cantando, de De Kooning (1965), o Desnudo, de Francis Bacon (1960), son algunas de las piezas que se pueden ver en el Museo de Bellas Artes bilbaíno. Saura es el pintor con más cuadros expuestos y los que menos obras aportan son Dubuffet y Picasso, con tres cada uno. Todos los pintores utilizaron preferentemente el óleo sobre lienzo para realizar sus trabajos. 'Frente a la búsqueda del ideal formal del cuerpo heredero de la doctrina clásica, cada uno de los pintores presentes en esta exposición desarrolló una alternativa a la supervivencia del tema del desnudo desde el presupuesto común del final del paradigma de belleza académico', concluyó Calvo Serraller.
Babelia
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