Homs insiste en sumar al PSOE al acuerdo sobre financiación autonómica
Los consejeros de Hacienda de los gobiernos de Baleares, Cataluña y Comunidad Valenciana, Joan Mesquida (PSOE), Francesc Homs (CIU) y Vicenç Rambla (PP), respectivamente, evidenciaron sus discrepancias estratégicas y de contenido sobre el nuevo sistema de financiación autonómica, del quinquenio 2002-2006, a lo largo de un encuentro celebrado ayer en Mallorca. El catalán Homs insistió, no obstante, en invitar al PSOE al pacto que CiU quiere alcanzar con el Gobierno del PP para 'reencontrar el espíritu constitucional', en una negociación ajena al juego sucio. 'CiU de cara al PP podría estar a la expectativa y ser contemplativa', explicó en su tesis de acercamiento a los socialistas. De esta manera, Homs hacía nuevamente hincapié en la necesidad de sumar al PSOE al acuerdo, en contraste con lo expresado anteayer por el conseller en cap, Artur Mas, quien se mostró contrario a la petición del PSOE de que se reconocieran los 700.000 millones de pesetas que Andalucía, Castilla La Mancha y Extremadura dejaron de ingresar al no acogerse al modelo de financiación pactado en 1996 por CiU y PP.
Los socialistas de Baleares reivindicaron antes que el método de financiación el cuánto se repartirá y ponderar el peso de la población real. Los nacionalistas catalanes acentúan su opción para definir un marco estable de participación en la recaudación de los impuestos. A su vez, los conservadores de la Comunidad Valenciana destacan que la cesta de impuestos que el Gobierno Aznar pone sobre la mesa para la nueva negociación ya recoge el incremento poblacional y de recaudación de los tributos. 'Debemos beneficiarnos del crecimiento del futuro', reseñó el consejero de CiU, que reclamó que el 'nuevo marco general no sea definitivo', en un horizonte de 'más solidaridad' general para todas las comunidades, que podrían haber asumido ya todas las competencias posibles, entre ellas las más caras como la Sanidad.
Para el responsable de Baleares una de las cuestiones centrales, previas, es el reconocimiento del incremento del 20 por ciento de incremento de población de las islas en una década. Mesquida asume que el déficit histórico de la balanza fiscal debería tener una salida en el plan especial de Baleares. Mesquida recalcó el impacto de la población flotante en comunidades turísticas y de los inmigrantes. El consejero valenciano detalló que el IVA, y cinco tributos especiales, entre ellos el de matriculación y tabaco, reflejarán la evolución socioeconómica y el consumo.
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