Los responsables de la nueva Feria no logran concretar cómo financiarán los 80.000 millones

El consejero delegado de Bilbao Exhibition Centre, José Miguel Corres, reveló que hoy se adjudicará la primera fase de las obras de la futura Feria, que consiste en la demolición de los restos de Altos Hornos. Aunque el solar parece vacío tras el derribo hace más de dos años de las principales instalaciones, está pendiente la retirada de elementos subterráneos, como depósitos de combustible y cimientos de la antigua factoría. Estas tareas durarán cerca de cinco meses, según dijo Corres, 'pero en paralelo se irán habilitando los garajes y las cimentaciones de la nueva Feria'.

Según estos cálculos, a finales de este año se iniciará la construcción de los seis pabellones de exposición, con 117.700 metros cuadrados de superficie, a lo que se añaden otros 31.750 metros cuadrados del edificio principal, de 95 metros de altura y que acogerá un centro de congresos y las oficinas propias del ferial. Los pabellones estará cubiertos de hierba artificial, 'para dar un tono verdoso a los tejados' y la sociedad estudia la implantación de plantas de energías alternativas dada la estructura plana de las instalaciones. Además habrá otros 180.000 metros cuadrados, distribuidos en cuatro plantas subterráneas, que se destinarán a aparcamientos, con una capacidad de 4.000 vehículos.

Corres presentó públicamente la maqueta del proyecto, cuyas líneas generales fueron avanzadas hace dos meses. El futuro recinto, que dispondrá también de un hotel, comercios y restaurantes y una estación intermodal para el metro de la Margen Izquierda y autobuses, destaca por las facilidades para el transporte de los productos que se expondrán. 'La nueva Feria estará totalmente rodeada por viales para el tránsito de camiones de gran tonelaje, que podrán entrar a los pabellones hasta por cuatro sitios diferentes. En la actual Feria la carga y descarga sólo se puede hacer de uno en uno [camiones]', afirmó Corres.

Viales ocultos

Los viales para el tránsito de camiones estarán además ocultos, ya que sobre ellos se habilitarán calles peatonales, con cristales traslúcidos, para el tránsito de personas y acceso a los pabellones.

José Miguel Corres dijo que la financiación de los 80.000 millones de pesetas sigue en la misma situación, es decir sin concretarse. Cuando en 1999 se planteó el traslado a Barakaldo, los accionistas de la Feria de Bilbao -Diputación (37,5% de las acciones), Ayuntamiento de Bilbao (31,85%), Cámara de Comercio (21,9%) y Gobierno vasco (9%)- pensaban en costearla en gran parte con el solar actual junto a San Mamés. La idea era la recalificación de los terrenos, en un área muy apetecida para construir viviendas, y dedicar lo obtenido con la venta para el emplazamiento en Barakaldo.

El obstáculo surgió del consistorio de Bilbao, donde PNV-EA gobierna en minoría con el apoyo de ICV, puesto que este partido y el resto de la oposición se han mostrado radicalmente contrarios al traslado del recinto fuera de la capital. Hace cinco meses, el Ayuntamiento bilbaíno, con el rechazo de PNV-EA, ya instó al presidente de la Feria de Muestras, Ignacio Echevarría, a que paralizase los trámites de la mudanza hasta que concluyeran dos estudios encargados por el consistorio sobre esta cuestión.

Ante ello, el diputado general de Vizcaya, Josu Bergara, anunció hace un año que se recurriría el endeudamiento a largo plazo, pero aún no se han concretado ni cantidades ni fechas. 'La financiación no ha cambiado', aseguró José Miguel Corres.